Meta ha reaccionado a las informaciones que aparecieron el fin de semana sobre su posible retirada de los servicios de Facebook e Instagram en Europa. Lo ha hecho a través de un comunicado oficial firmado por Markus Reinisch, vicepresidente de políticas públicas para Europa en el que asegura que la compañía "ni quiere ni amenaza con abandonar Europa y cualquier informe que implique que lo hacemos simplemente no es verdad".
"No tenemos absolutamente ningún deseo de retirarnos de Europa; por supuesto que no lo tenemos", explica Reinisch quien añade que "como todas las empresas que cotizan en bolsa, estamos legalmente obligados a revelar riesgos materiales a nuestros inversores" y es lo que hicieron en el informe trimestral de sus resultados financieros. En ellos, como vienen haciéndolo habitualmente, "revelamos la continua incertidumbre sobre los mecanismos de transferencia de datos entre la UE y los Estados Unidos, que representa una amenaza para nuestra capacidad de servir a los consumidores europeos y operar nuestro negocio en Europa".
La compañía explica que esta situación no es nueva y que desde al menos el segundo trimestre de 2019 "hemos destacado el riesgo específico para nuestros servicios en Europa y la necesidad de un mecanismo de transferencia de datos seguro entre la UE y los EEUU" ya que "las transferencias internacionales de datos sustentan la economía global y apoyan muchos de los servicios fundamentales para la vida diaria".
Pide un nuevo marco
Reinisch aún así hace referencia a que Meta, "como muchas otras empresas", depende de las trasferencias de datos de usuarios intercontinentales tras la anulación del 'escudo' de protección de datos entre la UE y EEUU por parte de la justicia europea, una decisión que "se ha tomado sobre la base de un conflicto entre las leyes de la UE y EEUU sobre protección de datos". Por eso pide que "se protejan los derechos fundamentales de los usuarios de la UE y queremos que internet siga funcionando como estaba previsto: sin fricciones, de conformidad con la ley pero no confinadas por las fronteras".
Emplazan de este modo a Europa a ver "un progreso continuo en las negociaciones para un reemplazo del Escudo de Privacidad para proteger las transferencias de datos transatlánticas, garantizar una sólida protección de la privacidad y mantener conectadas a las comunidades, economías, empresas y familias globales".
Tras las palabras de Vestager
La declaración oficial de Meta llega pocas horas después de que la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager, saliese al paso de la supuesta amenaza de retirada de los servicios por parte de Meta en Europa.
En declaraciones a Bloomberg, la comisaria se desmarcaba de las declaraciones que habían tenido ministros alemanes y franceses quienes aseguraban que estarían bien sin las redes sociales. Ella por su parte aseguró estar en Instagram, aunque "si ya no funciona, me daría tal vez 10-20 minutos al día". Eso sí, añadió que "en política he aprendido que nunca deberías amenazar con irte, deberías amenazar con quedarte". De este modo la jefa digital de la UE tendía la mano a Meta al mismo tiempo que le instaba a acatar las normas europeas para seguir operando en el país.
Lo cierto es que Meta vive unas semanas en plena vorágine con una caída libre de sus acciones tras unos resultados que no han convencido a los inversores debido a que por primera vez ha perdido usuarios. Un termómetro ante el que la compañía redobla sus esfuerzos por introducir apresuradamente el concepto del metaverso, su gran salvavidas para renovarse y no morir.