Telefónica ha puesto en marcha la creación de una filial para el despliegue de fibra óptica en España en zonas rurales, lo que se conoce como una FibreCo, en la que la compañía está dispuesta a dar entrada a posibles inversores con una participación minoritaria "importante".
Así lo anuncia el grupo de telecomunicaciones en el informe de resultados del ejercicio 2021 remitido este jueves a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, este vehículo inversor que van a poner en marcha Telefónica España y Telefónica Infra tiene como objetivo desplegar más de cinco millones de unidades inmobiliarias en "zonas de menor densidad".
En la presentación que realizará la compañía para los analistas la empresa detalla que esa "participación minoritaria importante" abierta a la entrada de posibles inversores podría alcanzar el 45% del capital, mientras que Telefónica conservaría el otro 55%.
La red actual de fibra de Telefónica llega ya a 26,9 millones de unidades inmobiliarias, lo que supone un 6,7% más que los 25,22 millones de hace un año. Sobre esta cifra, la operadora prestaba servicio en un 29% del total, lo que incluye tanto los accesos minoristas como los accesos mayoristas conectados a la red FTTH.
Consolidación con operadores rurales
En una rueda de prensa para analizar los resultados de 2021, Vilá ha detallado que esos cinco millones de unidades inmobiliarias es el objetivo a alcanzar en un plazo de tres años. De esta cifra, la mitad, o algo menos, serán hogares en los que ya ha desplegado fibra Telefónica y que se aportarán a esta FiberCo.
La otra mitad corresponderán tanto a los nuevos despliegues que realice esta nueva filial de fibra a rural como a los que se puedan incorporar de otras operadoras. Y es Vila ha asegurado que esta nueva compañía "nace con la ambición de facilitar la consolidación" en un espacio tan fragmento como el de la fibra rural.
En este sentido, ha detallado que buscan crear un vehículo que tenga crecimiento tanto en su expansión geográfica como en la captación y conexión de clientes a su red. Además, se busca evitar un sobredespliegue en zonas rurales, a las que es menos rentable llevar los servicios de fibra.
Por otro lado, ha señalado que en la compañía analizaron varias opciones para cristalizar el valor que tienen los activos de fibra. Al final, optaron por la creación de esta filial para despliegues en zonas menos densas, principalmente poblaciones de menos de 20.000 habitantes, y descartaron la posibilidad de escindir el resto de su red en una empresa independiente.
Asimismo, el consejero delegado de Telefónica ha señalado que en estos momento están preparando y diseñando este proyecto y no han empezando a contactar con los posibles inversores. Además, ha incidido en que lo que está claro es que Telefónica quiere mantener el control de esta FiberCo, de la que será su cliente "ancla".
Por otra parte, también ha agregado que este proyecto va a tener acceso a las ayudas que concede España para el despliegue de la banda ancha, que estarán a partir de ahora financiadas con los fondos europeos Next Generation. En la última convocatoria del plan UNICO, Telefónica se hizo con más del 78% de los 250 millones de ayudas que concedió el Gobierno.
Apuesta por las FiberCo
La creación de esta FiberCo en España está en línea con la apuesta realizada por la compañía de telecomunicaciones de establecer alianzas con socios inversores para desplegar fibra en países como Alemania, Brasil, Chile y Colombia, y se replicará también en Reino Unido.
En este sentido, Telefónica confirma que, como parte de la "ambición" de Virgin Media O2, su filial en el país junto a Liberty Global, de desplegar más fibra más rápido en todo Reino Unido, los accionistas han iniciado conversaciones con varios potenciales socios financieros para la creación de una joint venture de construcción de redes.
En concreto, detalla que esta entidad se centrará en la construcción de una red de fibra de hasta siete millones de unidades inmobiliarias en nuevas áreas greenfield (zonas sin ninguna cobertura) para finales de 2027.
Actualmente, la compañía mantiene alianzas con KKR en Chile y Colombia para el despliegue de fibra óptica. En ambos casos la operadora de telecomunicaciones posee una participación en la empresa conjunta del 40%, mientras que la firma inversora ostenta el otro 60%.
En el caso de Alemania, Telefónica tiene una joint venture al 50% junto a Allianz para desplegar 50.000 kilómetros de fibras en zonas rurales y semirrurales del país. En Brasil estableció el pasado año una filial junto al fondo soberano canadiense CDPQ, también al 50%, para llevar la fibra ciudades de tamaño mediano seleccionadas en todo el país, excluyendo el estado de São Paulo.
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