Las tres grandes telecos se han enfrentado en los últimos años a un alto nivel de competencia en España que, según aseguran, ha sido creado "artificialmente" por una regulación europea que se ha quedado obsoleta. Así, trimestre a trimestre han ido perdiendo cuota de mercado en ingresos en favor de los nuevos actores, primero MásMóvil, ya consolidado como cuarto operador, y más recientemente Digi.

De hecho, según los últimos datos publicados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), Movistar, Orange y Vodafone coparon en el segundo trimestre de 2023 el 69,9% del total de ingresos minoristas del sector español de las telecomunicaciones y audiovisual. 

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Este porcentaje es tres puntos porcentuales inferior al 72,9% del mismo periodo de 2022 y supone un descenso de 4,6 puntos porcentuales respecto al dato de hace dos años (74,5%). Lejos queda ya lo ocurrido a mediados de 2017, cuando las tres principales operadoras de nuestro país suponían más del 80% de los ingresos minoristas. 

En concreto, dos de las tres grandes compañías de telecomunicaciones de nuestro país han visto reducir su cuota de mercado en los últimos años. Telefónica sigue siendo el líder del sector por ingresos en España, pero ha pasado de representar el 40,8% del total en el segundo trimestre de 2022 a suponer el 37,6% en el mismo periodo de 2023. Hace dos años ese porcentaje era del 41,2%.

Tienda de Movistar.

En el caso de Vodafone, la operadora ha visto reducir su cuota de mercado por ingresos minoristas hasta el 15,3%, cinco décimas menos que el 15,8% del segundo trimestre de 2022 y 1,3 puntos menos en comparación con el 16,6% registrado en el mismo periodo de 2021.

Por el contrario, la cuota de mercado de Orange se ha incrementado seis décimas en el último año, desde 16,4% al 17%, mientras que sube tres décimas respecto al 16,7% del segundo trimestre de 2021. La compañía lleva muchos trimestres moviéndose unos porcentajes situados alrededor del 17%.

Nuevos operadores 

A diferencia de la evolución de los ingresos de estas compañías, los nuevos actores del mercado español siguen ganando cuota de mercado. Aunque no es exactamente un recién llegado, el Grupo MásMóvil acapara actualmente el 11,5% del total de ingresos minoristas, frente al 10,7% del segundo trimestre de 2021 y el 7,9% del mismo periodo de 2021. 

También crece considerablemente la cuota de mercado de la categoría Resto, en la que están incluidos los resultados de la filial española de la compañía rumana Digi, el operador que más crece actualmente en España.

Exteriores de la sede de Digi en Madrid. Digi

En concreto, las compañías englobadas en Resto han pasado de tener una cuota de mercado del 8% en el segundo trimestre de 2021 y del 9,9% en el de 2022, a suponer un 12,5% del total de los ingresos minoristas en el mismo periodo de 2023.  

En términos generales, los ingresos de los servicios minoristas del sector español de las telecomunicaciones y audiovisual alcanzaron entre abril y junio de 2023 los 5.743 millones de euros, lo que supone un ligero aumento del 0,9% respecto a los 5.693 millones de euros de hace un año.

Ingresos

Este escenario marcado por una elevada competencia y el auge del mercado del bajo coste ha llevado a las tres grandes operadoras del mercado español a poner en marcha distintas iniciativas con el objetivo de incrementar sus ingresos en nuestro país al mismo tiempo que incrementan su rentabilidad y su eficiencia.

Precisamente, Telefónica presentó la semana pasada a los inversores GPS, su nuevo plan estratégico para el periodo de 2023-2026. Una nueva hoja de ruta en la que la compañía presidida por José María Álvarez-Pallete asegura que el crecimiento desempeñará un papel fundamental. 

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En el caso de España, prevé que en los próximos tres años aumenten tanto sus ingresos como su resultado bruto de explotación (Ebitda). Para ello se apoyará en su marca reconocida (Movistar), su liderazgo en redes de fibra y móvil, su completa oferta de servicios y la calidad de los mismos. Esto ya le ha permitido aumentar el ingreso medio por usuario (ARPU por sus siglas en inglés) y reducir la tasa de baja de clientes (churn).

Más drástica ha sido la decisión del grupo británico Vodafone, que finalmente ha decidido tirar la toalla en nuestro país y vender su filial en España por 5.000 millones de euros a Zegona, fondo que ya fuera en el pasado accionista de otros dos operadores españoles Telecable y Euskaltel.

Imagen de una tienda de Vodafone. Eduardo Parra Europa Press

Los nuevos dueños de Vodafone ya han confirmado que pondrán al frente de la operadora a José Miguel García, ex consejero delegado de Jazztel y Euskaltel, y han adelantado cuáles serán sus prioridades para devolver a la empresa a números negros en ingresos: el impulso de la segunda marca Lowi y un mayor foco en los negocios de empresas y mayorista.

Por su parte, Orange decidió embarcarse hace 18 meses en una fusión en España con el Grupo MásMóvil con el objetivo de crear un competidor más fuerte que sea capaz de llevar a cabo las inversiones necesarias en el mercado español. Una operación que también se espera que aporte más racionalidad al sector.

Sin embargo, todo dependerá de las condiciones que Bruselas impongan a la fusión. Una vez que parece descartado que sea aprobada por la Comisión Europea sin remedies, la duda está hora en hasta qué punto estos remedies puedan reforzar aún más a Digi y complicar el objetivo de crecimiento que se han marcado los tres grandes operadores.