
Simulación de la constelación de satélites LEO de AST Spacemobile. AST Spacemobile
La nueva carrera espacial: telecos y tecnológicas aceleran el paso para conectar un móvil directamente al satélite en 2025
Vodafone y AST acaban de hacer la primera videollamada con esta tecnología, mientras los gobiernos dan nuevas licencias a servicios como Amazon Kuiper.
Más información: El plan de Elon Musk para que los móviles siempre tengan cobertura por tierra, mar y aire a través de sus satélites
El desarrollo tecnológico ha hecho que el espacio se haya convertido de nuevo en foco de interés tanto para los Estados como para las empresas privadas. El desarrollo de satélites más pequeños (y baratos), un proceso liderado por Elon Musk y su compañía SpaceX, ha despertado un renovado interés por una industria que ofrece cada vez más oportunidades.
Y una de ellas tiene que ver con las comunicaciones. Aunque el uso de los satélites para prestar este servicio no es algo nuevo, los avances registrados en los últimos tiempos van a permitir funcionalidades que hasta hace no mucho parecían imposibles. Por ejemplo, que un teléfono móvil pueda conectarse directamente a un satélite, lo que se conoce Direct-to-Device (D2D por sus siglas en inglés).
Tanto compañías y directivos del sector tecnológico como operadoras de telecomunicaciones están llevando ya a cabo pruebas para que este tipo de conexiones, que permitirán usar un teléfono móvil en prácticamente cualquier parte del mundo, sea una realidad este mismo año 2025.
Hace algo más de una semana, Vodafone y su participada AST Spacemobile (en cuyo accionariado también están Google, AT&T, Rakuten o American Tower) anunciaron que habían realizado la primera videollamada de la historia en una zona sin cobertura móvil de Gales gracias a un dispositivo conectado directamente a un satélite.
Un hito que se suma al que ya lograron en septiembre de 2023, cuando completaron la primera llamada 5G del mundo usando un smartphone estándar con conexión satelital. La llamada se hizo dese Hawai a un ingeniero de Vodafone en España.

Margherita Della Valle, consejera delegada de Vodafone Group, y el astronauta Tim Peake. Vodafone
Tras más pruebas que tendrán lugar esta primavera, Vodafone asegura que intención es empezar a comercializar de forma progresiva un servicio satelital de banda ancha directo al smartphone en varios mercados europeos a partir de finales de este año y durante 2026.
Mientras, en Estados Unidos, la alianza entre Starlink y T-Mobile, filial del grupo alemán Deutsche Telekom, ha empezado a ofrecer a los clientes de la operadora en modo beta la posibilidad de utilizar la red de la empresa de Elon Musk para enviar mensajes de texto cuando no haya cobertura.
T-Mobile ha lanzado este servicio, que ya está disponible tanto para modelos con sistema operativo Android como iOS, sin coste extra y adelanta que su intención es incorporar servicios de voz y datos en un futuro.
Ya sea para conexiones directas al smartphone o para prestar servicios de conectividad de banda ancha fija más tradicionales en zonas a las que no llega la fibra, lo cierto es que cada vez hay más empresas compitiendo por capturar el nicho de negocio que se ha abierto con la conectividad satelital.
Licencias
Un mercado que ha estado liderado por Starlink, pero al que posteriormente se sumó Amazon con su proyecto Kuiper, la ya mencionada AST o los operadores satelitales tradicionales. Sin embargo, para poder prestar estos servicios es necesario que estas compañías obtengan antes la autorización de los países.
Esta semana se han producido dos importantes novedades al respecto. La Comisión Federal de Comunicaciones de Estados Unidos (FCC, por sus siglas en inglés) ha otorgado a AST SpaceMobile una licencia temporal para operar servicios de internet de banda ancha satelital directa al móvil para AT&T y Verizon, dos de las grandes operadoras de telecomunicaciones del país.
Por otro lado, el regulador británico Ofcom ha concedido a Amazon una licencia de red de estaciones terrestres para operar su sistema de satélites de órbita baja. Y en su solicitud, la compañía ya adelantó que estaba explorando opciones para prestar conectividad D2D y trabajando para desarrollar las soluciones técnicas más versátiles posibles.
En el caso de España, Starlink ofrece sus servicios desde principios de 2022, mientras que Amazon Kuiper recibió recientemente la licencia del Gobierno para poder operar. En nuestro país también existe un programa público, Conéctate 35, que subvenciona la conexión internet por satélite en zonas rurales. El encargo de prestar este servicio es Hispasat, compañía recientemente adquirida por Indra.
Tecnología
Hasta hace poco no era posible conectar un satélite directamente a un teléfono móvil habitual, pero como explica Telefónica en un artículo publicado recientemente en su blog, el uso de bandas del espectro móvil y las mejoras tecnológicas han hecho que esta opción se haya convertido en una realidad.
La clave está en las recién lanzadas constelaciones de satélites de órbita terrestre baja (LEO). Como indicó Indra en la conferencia de analistas sobre la compra de Hispasat, su coste de fabricación es unas 200 veces más barato que el de los satélites geoestacionarios (GEO) y además permiten una fabricación en masa, dado que gran parte de sus componentes son estandarizables.

Una persona con una antena Starlink. Omicrono
Aunque los servicios Direct-to-Device basados en GEO son viables, las constelaciones LEO, que orbitan mucho más cerca de la tierra, son más adecuadas. Además, hay que añadir otros avances como lo mejora del mercado de lanzamiento de satélites o de la tecnología de antenas.
Sin embargo, su desarrollo todavía está en fase incipiente y hay varios factores que hacen que de momento sea sólo un complemento de las redes móviles y fijas allí donde no hay cobertura y no un sustituto. Actualmente, su capacidad es inferior, la cobertura en interiores es limitada y su rendimiento no es tan elevado.
A esto hay que sumar que, como cualquier avance tecnológico, su desarrollo presenta retos regulatorios en numerosos aspectos, ante lo cual, como apunta Telefónica, la cooperación y la asociación entre los proveedores de satélites y los operadores de telefonía móvil es clave.
Y luego está la gestión del espectro, un bien escaso y preciado. "La gestión eficaz del espectro es esencial para abrir oportunidades a la conectividad por satélite sin crear perturbaciones, ni escasez de espectro a los servicios terrestres existentes", incide Telefónica.
Precisamente, esto ha sido fuente de enfrentamiento en las telecos europeas y Musk. El motivo, la petición del dueño de SpaceX de relajar las salvaguardas establecidas por los reguladores para evitar que las señales emitidas a través de los satélites puedan provocar interferencias en las redes móviles terrestres.
Mientras las operadoras del Viejo Continente avisan de que esto podría provocar una degradación del servicio y un aumento de los costes de despliegue, Musk les acusa de querer "detener el progreso" y obstaculizar el desarrollo de la tecnología D2D.