‘Kichi’ no podrá prohibir los pisos turísticos en Cádiz tras el voto en contra de PSOE

El Ayuntamiento de Cádiz celebraba este martes a primera hora un Pleno extraordinario para abordar la regulación de los apartamentos turísticos, unos inmuebles que suponen la “expulsión de vecinos” de la ciudad a juicio del alcalde, José María González ‘Kichi’. Finalmente, el sueño turístico del alcalde ‘morado', que seguía la estela de la regidora de Barcelona, Ada Colau, no podrá hacerse realidad.

El PSOE, partido determinante para que la iniciativa saliera adelante para sumar mayoría absoluta, ha votado en contra de la misma. Ante dicha postura, desde el Consistorio han sido tajantes: “hay cosas que no se entienden” frente a una iniciativa “pionera” en el marco turístico y residencial.

La propuesta a Pleno planteaba iniciar el proceso de modificación del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), a fin de regular el uso turístico en suelo residencial. Con ello, se pretendía incluir las viviendas con fines turísticos cuyas licencias concede la Junta de Andalucía y que hasta ahora no estaban recogidas en el PGOU.

“El PSOE ha votado junto al PP y en contra de los colectivos sociales y vecinales” ha expresado el alcalde de la capital gaditana tras la decisión de los socialistas. “No podremos regular los apartamentos turísticos. No podremos poner coto a la expulsión de vecinos y vecinas de Cádiz”.

A juicio, dichas fuerzas políticas “anteponen la especulación al derecho a ciudad”. Precisamente, ‘Kichi’ defendía la regulación al ser “urgente” para la ciudad gaditana, “donde ha subido el alquiler hasta más de un 90%".

285 viviendas turísticas ilegales

El Ayuntamiento ya anunció su intención de regular la concesión de licencias para viviendas de alquiler con fines turísticos con medidas basadas en el estudio realizado por la consultoría Ibermad. Los resultados del mismo apuntaban que en Cádiz constaban 1.224 viviendaslegalmente constituidas para ser alquiladas con fines turísticos mientras que en las plataformas de alquiler turístico las viviendas disponibles ascendían a 1.509.

Los datos arrojaban que casi el 20% del total de las viviendas turísticas no estaban dadas de alta como tal, una situación que desde el Consistorio buscaban zanjar para que la ciudad “conserve su esencia, su identidad y no se convierta en un decorado visitado por turistas”.

El concejal de Urbanismo, Martín Vila, explicó entonces que los planes del Ayuntamiento pasaban por actuar “a tiempo” para evitar la proliferación “descontrolada” de tales viviendas. “Debe regularse este fenómeno para salvaguardar el carácter residencial de la gran mayoría de viviendas de la ciudad. Hay que evitar una burbuja turística en la ciudad”, argumentaba el edil gaditano.