Los rebrotes, los vetos de los países y algunas normativas polémicas -como el cierre del ocio nocturno- han terminado de lapidar la temporada turística este verano. El sector ya la da por perdida (excepto en Canarias) y ahora toca esperar a una resaca con muy mala pinta: se espera una oleada de cierre de negocios y de despidos a partir del mes de septiembre. 

Las cifras varían en función de los subsectores turísticos y las patronales, pero la mayoría coinciden en que el sector turístico podría perder más de un millón de trabajadores en su conjunto. “Prevemos que muchas empresas entrarán en concurso de acreedores y que muchos ERTE se convertirán en ERE, por lo que superar el millón de despidos con seguridad”, señala Juan Molas, presidente de la Mesa de Turismo. 

A cierre de julio, ya había 823.000 empleados menos que en el mismo periodo de 2019. Es un 37% menos de trabajadores. De esta cifra, unos 517.000 están en situación de ERTE y 306.000 son personas que directamente no han llegado a ser contratadas por esta caída de la actividad. 

Además, el número de trabajadores dados de alta en la Seguridad Social en actividades vinculadas al sector turístico registró en este mes una caída interanual del 11,6%, hasta 2.314.971 cotizantes (302.889 menos) por la crisis del coronavirus, según los datos incluidos en el Informe sobre Empleo en Turismo elaborado por Turespaña.

Destaca la caída interanual de afiliados vinculados a actividades turísticas en julio de 302.889 trabajadores, cuando en el conjunto de la economía española se redujeron en 616.496 personas. La pérdida interanual de afiliados se registró en todas las ramas turísticas.

La hostelería decreció en 233.765 trabajadores (142.180 afiliados menos en los servicios de comidas y bebidas y 91.585 menos en los servicios de alojamiento); otras actividades turísticas disminuyeron en 59.849 afiliados y las agencias de viaje perdieron 9.275 empleados.

Caída de la hostelería

En el caso de la hostelería “hay un 20% de personas que todavía están en ERTE y habrá muchos cierres de negocios”, señala a Invertia el presidente de Hostelería España, José Luis Yzuel, quien califica de "injustas" medidas como cerrar el ocio nocturno o prohibir fumar en lugares públicos si no se pueden guardar la distancia de seguridad. 

En el escenario actual, 40.000 negocios ya han echado el cierre y se prevé que 65.000 habrán desaparecido a final de año. En caso de que empeorara la crisis sanitaria, podría verse afectada la supervivencia de hasta 85.000 establecimientos, según datos de la plataforma ‘Juntos con la Hostelería’, formada por Hostelería de España, FIAB y Aecoc. 

Las previsiones que maneja el sector, en el peor de los escenarios, situarían la caída por encima de 400.000 trabajadores directos. Por su parte, un estudio realizado por la consultora Foqus y la Universidad de Valencia en el mes de junio, señala que la pérdida de empleo podría ser de entre 900.000 y 1,1 millones de puestos de trabajo, entre directos e indirectos.

Hoteles, agencias y aerolíneas

Atendiendo al sector hotelero, solo un 25% de los hoteles están abiertos en España. Muchos de ellos están abocados al cierre y otros siguen con sus plantillas en ERTE. En las agencias de viajes la situación también es complicada. Actualmente, de los 9.500 puntos de venta que existen en España, la mitad (unas 4.800) están aún cerradas y creen que no podrán abrir en los próximos meses. 

Y por poner un último ejemplo dentro del sector turístico, las aerolíneas asistirán a un aluvión de despidos a partir de septiembre. IAG ya prepara a sus aerolíneas para ello, mientras que los pilotos de Ryanair ceden para salvar su puesto de trabajo y se rebajan un 20% el sueldo. 

Desde la alianza turística Exceltur también anticipan un impacto “de dimensiones inéditas a fines de verano”. Y más teniendo en cuenta que, según sus estimaciones, el sector turístico español perderá 99.000 millones de euros al finalizar la temporada. 

Extender los ERTE

En esta circunstancia, la extensión de las condiciones de los ERTE hasta el 31 de diciembre es vital para la supervivencia de una parte del sector. Gobierno, sindicatos y empresarios se reunirán el próximo 4 de septiembre en Palma de Mallorca para negociar la prórroga, más allá del 30 de septiembre.

Aunque “sólo algunos sectores como la hostelería, la restauración y la hotelería tienen garantizados la extensión de los ERTE hasta finales de año”, reconocen fuentes conocedoras del proceso. Eso quiere decir que otros como las agencias de viajes, los medios de transporte o los servicios de alquiler de coches se quedarán fuera.

Lo cual sería un auténtico drama que incrementaría el hartazgo del sector con el Gobierno, del que consideran que ha realizado una “mala gestión diplomática” para evitar los vetos y cuarentenas. Además, tampoco ayudan las trabas burocráticas para poder acceder a determinadas ayudas para el sector.