Como si la crisis de la pandemia no fuera con Ryanair, la low cost irlandesa acaba de anunciar un pedido 75 Boeing 737 MAX. Se trata del modelo que estuvo durante dos años parado por protagonizar dos accidentes mortales y que recientemente ha sido certificado para volver a volar.
La empresa espera recibir a finales del primer trimestre las primeras unidades del modelo. El acuerdo entre Ryanair y Boeing incrementa hasta los 210 los pedidos pendientes con el fabricante. La aerolínea tenía 135 unidades ya encargadas y le restaban 75 opciones que ha ejecutado en el día de hoy. Estos encargos tendrán un coste aproximado de unos 22.000 millones de dólares (unos 18.000 millones de euros).
Ryanair, que antes de la crisis del Covid-19 transportó cerca de 150 millones de pasajeros el año pasado, reconoce que perderá 35 millones de pasajeros este año, mientras que en 2022 espera superar los niveles precrisis. Es decir, adelantarse al 2024, año en el que la aviación mundial marca la recuperación de la demanda.
La compañía “utilizará estos nuevos aviones para expandir sus servicios de tarifas bajas en nuevos países y mercados de la UE, lo que incentivará a los consumidores europeos y su industria de viajes a recuperarse de la pandemia, tan pronto como se implementen las vacunas en 2021, y la vida vuelva a la normalidad”, señala en un comunicado.
Entregas
Ryanair y Boeing han acordado fechas de entrega revisadas, y también han acordado una compensación por los gastos directos en que ha incurrido Ryanair en los últimos 18 meses debido a estos retrasos en la entrega, aunque parte de esta compensación se ha tenido en cuenta en una modesta reducción del precio de este nuevo pedido de aviones.
Este nuevo avión Boeing de 197 asientos tiene el "tamaño perfecto", según la compañía, para permitir a Ryanair expandir y hacer crecer sus servicios de tarifas bajas en toda Europa durante la próxima década. "Este nuevo pedido de Boeing ayuda a Ryanair a reducir su base de costes y a volver a crecer en toda Europa en 2021, al ofrecer tarifas más bajas a los clientes", han remarcado.
"Boeing sigue centrado en devolver de forma segura la flota completa de 737 al servicio y en entregar la reserva de aviones a Ryanair. Creemos firmemente en este avión y continuaremos el trabajo para volver a ganarnos la confianza de todos nuestros clientes”, ha explicado Michael O'Leary, director ejecutivo del grupo Ryanair.