Entrecanales Domecq e Hijos inicia una nueva aventura empresarial. Y lo hace en el segmento del lujo. Se trata de ‘La Casa Cosme Palacio’, un alojamiento que se gestionará sólo por invitación y cuyos precios oscilan entre los 5.000 y los 10.000 euros la noche.
La exclusiva casa se encuentra en la que fue la bodega centenaria de elaboración que data de 1894, perteneciente al selecto club de Bodegas históricas de Rioja del siglo XIX. Y el proyecto pretende que los visitantes vivan la autenticidad de la experiencia en un contexto local, más allá de la privacidad, exclusividad y comodidad.
Asimismo, se suma a la tendencia Turismo Responsable y Slow Travel. La misma consiste en que el viajero visite menos lugares, pero pasando más tiempo en ellos. De esta manera se consigue un beneficio para el destino, con un fuerte impacto económico local.
Primera bodega
Conviene recordar que Bodegas Cosme Palacio fue la primera bodega en abrir un espacio dedicado al Enoturismo en La Rioja Alavesa. Fue allá en 1991, convertida hoy en ‘La Casa Cosme Palacio’. Ahora, casi siete años después de una remodelación completa y una redefinición filosófica, este edificio único de más de 125 años se convierte en el primer alojamiento de España que se gestiona en su totalidad bajo el concepto "By invitation only".
La casa se ubica a pocos metros de Laguardia, el pueblo medieval enclavado en el corazón de la Rioja Alavesa. También famoso por sus vinos. Una región en la que sobresale su rico patrimonio cultural, una gastronomía reconocida internacionalmente y una interesante representación de pueblos, aldeas y paisajes únicos que se han desarrollado en torno al vino, desde la Edad Media.
Uno de los dormitorios.
“Nuestro objetivo es ofrecer a nuestros invitados una experiencia única, muy exclusiva e integrada en el contexto local”, afirma Gonzalo Entrecanales. Y añade: “Este proyecto pretende contribuir a que nuestros huéspedes conozcan toda la riqueza que puede ofrecernos la Rioja Alavesa y sus alrededores: sus vinos, gastronomía, cultura y paisaje natural.”
Junto a ello, ‘La Casa Cosme Palacio’ “nace con una importante esencia y vínculo familiar. Por eso, el concepto responde a un tipo de alojamiento privado donde buscamos conseguir que nuestros invitados disfruten de la compañía y el entorno como si lo hicieran en nuestra propia casa”.
Servicios exclusivos
‘La Casa Cosme Palacio’ tiene una capacidad máxima de 26 personas y cuenta con 13 habitaciones. Ocupa un espacio de cerca de 4.000 m2 y alberga 4 suites, con todo tipo de servicios propios dignos de la categoría 5 estrellas.
Entre los servicios, destacan: mayordomo 24 horas al día, amenities premium, E-bikes, exclusivos tratamientos de belleza, experiencias sólo para invitados -una visita y cata privada a la bodega o una cena maridaje con añadas antiguas en los calados centenarios-, servicio de Guest Manager para el diseño de itinerarios a medida o mesa asegurada en los mejores restaurantes de la región…
Galería central.
Este verano inaugurará también una nueva piscina situada entre viñedos con vistas al Valle del Ebro. Dispone también de una maravillosa galería central donde se alojan los depósitos centenarios y las caballerizas -convertidas hoy en museo- donde tendrán lugar celebraciones más especiales en grupo.
“La diferenciación radica en el trato que ofrecemos a nuestros invitados. Preparamos la llegada de nuestros huéspedes al detalle, para ofrecerles una experiencia completamente personalizada en todos los aspectos. Queremos que nuestros invitados disfruten La Casa, alejados del estresante ritmo de vida que llevamos actualmente y donde pueden olvidarse de todo gracias al formato ‘Be my guest’. La magia y mística que se generan en torno a la experiencia de visitarla es lo más exclusivo”, asegura María, Guest Manager de La Casa.
Comedor.
La remodelación lleva la firma del arquitecto Gregorio Marañón, la paisajista María Medina y la interiorista Cristina Arechabala. El mismo está orientado a fomentar la tranquilidad y la relajación de sus huéspedes. ‘La Casa Cosme Palacio’ presenta un estilo único de líneas sencillas y funcionales, siguiendo la tendencia del minimalismo y de la excelencia sin estridencias.
Los invitados podrán disfrutar de espacios confortables, minimalistas, con un claro uso de los tonos cremas. Mobiliario sin alardes ni decoración excesiva que deja el protagonismo a la arquitectura y el entorno histórico de la bodega… Todo cuidado y pensado hasta el más mínimo detalle.