Mal EGM para la radio. Los datos del tercer Estudio General de Medios del año y el primero de la temporada certifican una caída generaliza de las audiencias de todos los programas y de todas las emisoras. En términos globales la radio generalista perdió 161.000 seguidores en relación a la oleada de verano.
Unas cifras que se explican por el hartazgo de los oyentes por la nueva campaña electoral que a la vuelta del verano irrumpió con fuerza en el trabajo de campo del indicador referente del mercado radiofónico.
En esta línea, la única emisora que ganó oyentes fue Cadena Ser, aunque solo 29.000 nuevos seguidores, solo un 0,7% más que los datos de junio. La emisora de Prisa cierra el año con 4.148.000 oyentes. Por su parte, Cadena Cope se deja 35.000 fieles, un 1,1% menos y se comerá el turrón con 3.124.000 oyentes.
Hundimiento de RNE
Onda Cero, la tercera en discordia, es la que más cae con 169.000 seguidores menos desde el verano, un retroceso del 8,5% hasta quedarse en 1.831.000 fieles y perdiendo la barrera sicológica de los dos millones conquistada a comienzos de este año.
Radio Nacional (RNE) pierde 10.000 oyentes (un 0,8%) y vuelve a registra el peor dato desde finales de 2008 con 1.178.000 fieles. La radio pública es la gran damnificada de la gestión de Rosa María Mateo como administradora única de RTVE.
Por su parte, esRadio, la emisora de Federico Jiménez Losantos llegó a los 580.000 oyentes, 44.000 menos que en junio, un 7,1% de retroceso. La emisora se aleja de su máximo histórico alcanzado en la oleada anterior aunque logra su segundo mejor dato desde su nacimiento.
Todos pierden en las mañanas
Por franjas, una de las más perjudicadas fue la mañana, donde todos los programas perdieron audiencia. El más damnificado fue Carlos Herrera ya que Herrera en Cope perdió 158.000 oyentes hasta los 2.229.000, un 6,6% menos en relación a sus datos del verano. El comunicador se aleja de su récord de 2,5 millones de seguidores registrado en abril de este año.
Del mismo modo, Àngels Barceló perdió 58.000 oyentes en su primer EGM al mando de Hoy por Hoy. El programa estrella de Cadena Ser se quedó en los 2.814.000 fieles, un 2%, que no logra capitalizar el gran crecimiento registrado en verano pasado.
Más de Uno, de Carlos Alsina, perdió 96.000 fieles en esta oleada, un 7,6% menos. De los tres grandes es el que más se deja hasta situarse en 1.174.000 seguidores. En esta misma línea, el estreno de Pepa Fernández en las mañanas de RNE se saldó con una caída de 51.000 oyentes hasta los 869.000, arrastrada por un desplome generalizado de la radio pública.
La tarde mejora sus datos
En las tardes las cosas mejoran. La Ventana de Carles Francino en Cadena Ser ganó 17.000 oyentes hasta los 907.000, un crecimiento del 1,9%. Julia en la Onda de Onda Cero mejora en 20.000 seguidores hasta los 580.000, mientras que La Tarde de Cope perdió 10.000 oyentes, un 2,1% hasta los 474.000 fieles.
La apuesta magazine y por temas sociales y culturales de las tardes de la radio ha sido su baza para aumentar su audiencia, a diferencia de las mañanas fuertemente politizadas y penalizadas por el ciclo electoral.
En el caso de las noches, Pepa Bueno se estrena en Hora 25 con 59.000 oyentes de crecimiento respecto de su antecesora Àngels Barceló. El programa nocturno de la emisora de Prisa se sitúa en un millón de oyentes.
La Linterna de Cope y de Àngel Expósito llegó a los 872.000 oyentes, 54.000 más que en verano lo que se traduce en un crecimiento del 6,6%. Por su parte, La Brújula de Juan Ramón Lucas se quedó en 372.000 oyentes, un crecimiento de mil fieles y un 0,3%.