Javier Monzón seguirá siendo presidente no ejecutivo de Prisa. Lo será tras ratificarse su continuidad en la Junta de Accionistas de este lunes en la que consiguió la aprobación de la mayoría del capital y la abstención de Amber Capital, fondo y dueño del paquete mayoritario de la compañía, que hasta último minuto iba a votar en contra de su continuidad y que, además, hizo campaña para apartarle de su cargo.
Las informaciones confirmadas por Invertia indican que esta abstención de última hora se produjo gracias a un pacto avanzado esta madrugada y cerrado a primera hora de este lunes en el que la banca acreedora garantizó que negociaría en condiciones más favorables la abultada deuda del grupo.
Los bancos acreedores -BNP Paribas, HSBC y algunos fondos como CVC- prometieron mejores condiciones de refinanciación de la deuda para Prisa que llega a 1.500 millones. Estas entidades pidieron paz y estabilidad accionarial para refinanciar con nuevas condiciones y aceleraron el pacto entre todos los accionistas para mantener a Monzón en el cargo.
Prisa debe realizar dos amortizaciones parciales y obligatorias de deuda el 31 de diciembre de 2020 y 2021 por importes de 15 y 25 millones de euros, respectivamente. Y debe pagar el grueso de la deuda en noviembre de 2022.
Si analizamos el impacto que puede tener el coronavirus en sus cuentas parece difícil que hoy por hoy se puedan consolidar estos hitos y todo parece aconsejar que el grupo se siente a negociar con la banca nuevos acuerdos de refinanciación para una deuda cerca a los 1.500 millones de euros.
Acuerdo Santander-Amber
Los acreedores han prometido buenas condiciones de renegociación, lo que le da un nuevo salvavidas al Grupo en medio de una guerra accionarial que, en principio, se pacifica hasta que se cierren las nuevas condiciones de la compañía con la banca acreedora.
La idea de los gestores es poder cerrar esta renegociación antes de que finalice este año. Unas gestiones que se mantendrán ahora con el apoyo de todos los accionistas que aparcan su lucha accionarial que vivió su momento más álgido este fin de semana.
Amber y el Gobierno intentaron hasta el último minuto tener los votos necesarios para cesar a Javier Monzón, pero el acuerdo con Joseph Oughourlian y la alianza entre Ana Botín, presidenta de Santander y José María Álvarez Pallete, presidente ejecutivo de Telefónica aunó posiciones de apoyo al presidente de Prisa.
Es así como se renovó a Monzón y a los consejeros Sonia Dulá y Javier de Jaime y, en principio, se pacifica todo hasta nuevo aviso. El Consejo de Administración se queda en doce personas tras la renuncia voluntaria de Javier Gómez Navarro.