Joan Laporta, presidente del FC Barcelona ha justificado la salida de Leo Messi del club en los problemas financieros de la entidad -con unas pérdidas de 487 millones de euros, que más que duplicaron los 200 millones estimados originalmente-, pero además en defensa de su independencia financiera al rechazar el acuerdo de LaLiga con el fondo CVC.
Laporta cargó contra este acuerdo y contra LaLiga acusándole de mantener una férrea disciplina financiera que les impidió inscribir al jugador.
Precisamente esta semana LaLiga llegó a un acuerdo con el fondo CVC para recibir una inyección económica de 2.700 millones de euros a cambio de un 10% de participación en el negocio del fútbol español a través de una nueva sociedad a la que LaLiga aportará todos sus negocios, filiales y joint ventures.
Adicionalmente CVC aporta fondos a LaLiga a través de una cuenta en participación, un acuerdo a largo plazo que alinea los intereses de LaLiga, los Clubes y CVC. LaLiga mantendrá intactas de esta nueva sociedad sus competencias deportivas y de organización y de gestión de la comercialización de los derechos audiovisuales.
La fórmula de reparto acordada por LaLiga (en base al reparto de derechos audiovisuales) indica que el FC Barcelona recibirá unos 252 millones de este montante y unos 243 millones el Real Madrid.
Deuda del FC Barcelona
Un dinero recibido en concepto de préstamo con un tipo de interés del 0% y con un plazo de 40 años para abonarlo, aunque a cambio deberá ceder su 10% proporcional en el negocio del fútbol español en las próximas cinco décadas, según ha denunciado el Real Madrid, que también se opone a la operación.
Esta dotaba de recursos al FC Barcelona y al resto de los clubes tras la crisis de ingresos por el coronavirus -donde ha caído un 29% su facturación- lo que les permitía ganar ese margen que necesitaba para poder cumplir con el límite salarial pese a su reducción de ingresos.
Los fondos recibidos por esta fórmula tendrán la consideración de patrimonio neto, por lo que no computarán como deuda en el balance y por tanto, no penalizarán a la hora de calcular los límites salariales o el Fair Play Financiero que fija la UEFA.
En el caso del FC Barcelona era la fórmula perfecta para poder encajar el salario de Messi en las cuentas del club y salvar las maltrechas cuentas. Como ya ha contado este diario su deuda asciende a 1.173 millones de euros y a corto plazo tiene que hacer frente al pago de 730 millones.
Laporta se ha visto obligado además a refinanciar 525 millones de ella a través de un acuerdo con Goldman Sachs, la empresa que vigila también ahora los movimientos del club y que reduce el margen de maniobra del presidente en ciertas operaciones.
Derechos de televisión
Sin embargo, y pese a esta situación, Laporta rechaza el acuerdo con CVC acusándole de hipotecar el dinero del fútbol y de malvender LaLiga en un contexto de pandemia. El FC Barcelona y el Real Madrid consideran que el campeonato vale más que 24.000 millones y que los 2.700 millones a cambio del 10% del negocio son cifras muy por debajo del verdadero potencial de la competición.
Los números indican que sin coronavirus LaLiga ingresa una media de 5.000 millones al año por televisión, taquilla, patrocinios y otras líneas de negocio y el acuerdo que CVC se quedará con el 10% de estos ingresos anualmente.
En el caso de los ingresos de televisión el último contrato se cerró por 3.500 millones de euros, solo en el mercado español, más otros 500 millones en derechos internacionales. En total 4.000 millones por tres años, aunque es muy difícil que estas cifras se vuelvan a repetir en el próximo contrato que se debe negociar a partir de septiembre.
Con todo, desde LaLiga se sostiene que no se están vendiendo los derechos futuros sino que se está lanzando un proyecto con otro partícipe que les permitirá crecer más rápidamente a futuro y ese otro participante en el negocio recibe una remuneración por ello. "CVC pone dinero y nosotros la gestión de los derechos, es cuentas en participación, pero sin vender nada", indican.
En LaLiga también se descarta que los 2.700 millones sean financiación· "CVC corre el riesgo del negocio. Si va bien ganan y si va mal pierden. En lo máximo podrían perder todo, no hay garantía de ninguna cantidad ni ingresos asegurados.
¿Impulso a la Superliga?
De hecho, Tebas sostiene que se está desarrollando un proyecto con un inversor que les permitirá crecer más rápidamente y por el que hay que remunerarle. Los clubes que se incorporen en el futuro se aprovecharán de los ingresos generados por una competición que ha crecido más rápidamente.
En cualquier caso, el acuerdo con CVC es aplaudido por el resto de clubes lo que augura que en la aprobación esté segura en la siguiente asamblea de LaLiga. ¿Se abre entonces la puerta a que el Real Madrid y el FC Barcelona se marchen a la Superliga? El pulso no ha hecho más que comenzar.