Ilustración de Joseph Oughourlian y José Miguel Contreras.

Ilustración de Joseph Oughourlian y José Miguel Contreras. EE

Medios

Prisa busca socios y ultima el plan estratégico del canal que presentará al concurso de TDT del Gobierno

José Miguel Contreras lidera un proyecto que podría ver la luz el próximo mes de septiembre de 2025. 

30 septiembre, 2024 01:17

Sin prisa pero sin pausa. Así se trabaja en Gran Vía 32, sede del grupo Prisa, para cerrar todos los detalles de su futura televisión. Sigue siendo un proyecto, dado que hasta el año 2025 no saldrá el concurso que convocará el Gobierno para una nueva licencia, pero el objetivo es tener todo listo a principios de año. Será entonces cuando el consejo de administración tenga que dar el visto bueno (o no) al plan de negocio

Según ha podido confirmar este diario por varias fuentes, en Prisa se trabaja con la idea de que el nuevo canal estará emitiendo en septiembre de 2025. Ahora bien, reconocen que -en función de los plazos administrativos- podría ser algo más tarde. En cualquier caso, antes de que acabe el próximo año. 

El trabajo ahora es terminar de definir el tipo de televisión que se va a hacer. El objetivo, por ahora, es aprovechar la fuerza informativa de El País y crear una televisión de noticias. Un proyecto muy parecido a lo que hace CNews en Francia. 

CNews, propiedad de Vincent Bolloré, es una cadena de información 24 horas que apoya a la ultraderecha. Es uno de los principales apoyos del ultraderechista Eric Zemmour, que incluso fue presentador estrella de la cadena televisiva.

Ahora bien, en este caso, el giro ideológico de la cadena de Prisa no sería la ultraderecha sino la izquierda. ¿Objetivo? Enfrentarse al universo catódico de la derecha y la ultraderecha en España. 

Sin embargo, todo puede cambiar porque todavía se está analizando cuál es el formato más adecuado para lograr la combinación necesaria entre audiencia, influencia e ingresos publicitarios. 

Según distintas fuentes consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia, es posible que Prisa busque a un partner con experiencia en televisión para lanzar su proyecto. Un formato similar al que usó cuando lanzó CNN+. 

Latam, clave 

Ahora se estarían teniendo contactos con distintos grupos de comunicación, sobre todo en Latinoamérica. Medios de Argentina, Colombia o Chile habrían sido contactados, sin que por ahora hayan fructificado las conversaciones. 

Una vez cerrados todos los detalles y elaborado el plan de negocio, será el momento de elevarlo al consejo de administración. Algo que, en principio, ocurrirá en el primer trimestre del año que viene. 

Ahí habrá una seria discusión sobre cuál debe ser la posición de Prisa, ya que no todos sus miembros tienen claro que el negocio de la televisión vaya a ser rentable. Entre las dudas está la del presidente, Joseph Oughourlian, quien todavía espera los números en negro sobre blanco antes de tomar una decisión concreta. 

La clave para convencer al consejo de Prisa estará en comprobar que realmente la inversión y el coste de mantener una licencia de TDT son beneficiosas para la compañía. Bien mediante la explotación directa de un canal o mediante el alquiler de la frecuencia a un tercer operador como ya hacen muchas empresas adjudicatarias. 

El equipo de José Miguel Contreras, director de contenidos de Prisa Media, cuenta con el respaldo, entre otros, del núcleo de accionistas españoles encabezado por Andrés Varela Entrecanales (consejero) y que están agrupados en Global Alconaba. También otros accionistas como Adolfo Utor y el conocido como 'rey de las ambulancias', Diego Prieto. 

La familia Polanco, a través de Rucandio, ostenta todavía algo más de un 7% y parece que también se muestra partidaria de dar luz verde a que Prisa vuelva a apostar por una televisión. 

En contra, además de Oughourlian, Vivendi. El grupo francés también tiene sus reticencias sobre el futuro del negocio televisivo. El resto de miembros del consejo, con Carlos Slim, Banco Santander y el mexicano Roberto Alcántara muestran sus reservas, pero no terminan de decantarse. 

Todavía queda tiempo para que la decisión sea firme, pero en los pasillos de Gran Vía 32 se da por hecho que el proyecto televisivo será una realidad más pronto que tarde. Incluso, la operación podría acelerar y reactivar la venta de Santillana.

Un momento en el que, como ha contado EL ESPAÑOL, sería aprovechado por Andrés Varela y el resto de accionistas 'patrios' para hacerse con el control del grupo de medios y dejar a un lado la editorial.