Por Parikshit Mishra y John ODonnell
La marcha atrás del segundo banco más grande de Suiza es inusual y representa una victoria para los inversores que están presionando cada vez más para que las remuneraciones sean más moderadas en un sector donde los beneficios han caído pero las compensaciones a menudo se han mantenido altas.
En un breve comunicado emitido el jueves, el banco dijo que había tomado la decisión después de que los accionistas "expresaran reservas" sobre el pago previsto, revirtiendo la defensa de los "bonus" que había realizado ese mismo día.
Los directivos de American International Group Inc también se negaron a otorgar el año pasado una bonificación en efectivo a su máximo ejecutivo, Peter Hancock, según un documentado registrado en el supervisor bursátil el jueves, después de que la floja evolución de la compañía provocara el enfado de los accionistas.
La decisión de Credit Suisse se produce en un contexto de creciente indignación de la opinión pública.
A principios de esta semana, un legislador que instigó un veto de los accionistas al pago excesivo a directivos en Suiza, Thomas Minder, había instado a los inversores a usar este poder para bloquear los elevados "bonus" de los altos ejecutivos de Credit Suisse.
Sus comentarios se sumaron a las presiones para que el banco suizo se replantease sus pasos después de que varios grupos de asesores dijeran a los accionistas que se opusieran a una parte o a la totalidad de los pagos cuando votasen este mes.