Alzas para los tres índices de la Bolsa neoyorkina, y destaca el Nasdaq
Wall Street cerró hoy al alza y el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, avanzó un 0,18 % pendiente de la comparecencia mañana del exdirector del FBI y de la reunión del Banco Central Europeo (BCE).
7 junio, 2017 20:06Al cierre de la sesión, ese índice avanzó 37,46 puntos y acabó en 21.173,69 unidades, el selectivo S&P 500 progresó un 0,16 % hasta 2.433,14 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq subió un 0,36 % hasta 6.297,38 puntos. Wall Street cerró al alza a la espera de la comparecencia mañana ante el Senado del exdirector del FBI James Comey, que ha despertado aún más interés después de que el presidente Donald Trump confirmara hoy que nominará para el puesto al abogado Christopher Wray. Además, los inversores estarán también muy pendientes de las noticias procedentes del otro lado del Atlántico, donde mañana concluye la reunión sobre política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). En segundo plano quedó hoy un fuerte desplome del precio del petróleo en los mercados internacionales, donde el barril de Texas cayó en Nueva York un 5,13 % y cerró en 45,72 dólares, y el crudo Brent bajó en Londres un 3,93 % y acabó en 48,06 dólares. Los sectores en Wall Street cerraron divididos entre los avances del financiero (0,58 %) o el tecnológico (0,30 %) y los descensos del energético (-1,62 %), el de materias primas (-0,22 %) o el industrial (-0,05 %). Nike (1,43 %) lideró las ganancias en el Dow Jones, por delante de UnitedHealth (1,32 %), American Express (1,22 %), JPMorgan Chase (1,15 %), Boeing (0,72 %), Apple (0,60 %), Goldman Sachs (0,58 %), Home Depot (0,49 %) o McDonald's (0,47 %). Al otro lado de la tabla encabezó las pérdidas Coca-Cola (-1,02 %) por delante de Caterpillar (-0,99 %), Merck (-0,94 %), IBM (-0,91 %), General Electric (-0,90 %), Chevron (-0,38 %), Exxon Mobil (-0,37 %) o United Technologies (-0,28 %). Al cierre de la sesión bursátil, el petróleo de Texas se cambiaba a 45,74 dólares, el oro bajaba a 1.289,3 dólares, la rentabilidad de la deuda pública a diez años bajaba al 2,178 % y el dólar ganaba terreno al euro, que se cambiaba a 1,1264 dólares.