La ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha mantenido hoy la primera reunión de diálogo social del curso político con los líderes de CEOE y Cepyme, Juan Rosell y Antonio Garamendi, y de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, en la que han hecho balance y ha planteado los asuntos para los próximos meses.
Entre ellos, ha planteado el incremento de las cotizaciones sociales por desempleo a las empresas que recurran en mayor medida a la contratación temporal y tengan una rotación excesiva.
También evaluarán las bonificaciones a la contratación, para crear nuevos incentivos para las empresas con mayor porcentaje de indefinidos.
A partir de ahora, la mesa de calidad en el empleo, en la que participan patronal y sindicatos, abordará este sistema de "malus" y "bonus" que ya estaba recogido en el acuerdo de investidura que firmó el Gobierno con Ciudadanos.
La mesa de calidad en el empleo tratará la reducción de cuatro a tres de los tipos de contratos: indefinido, temporal de indemnización creciente y formativo, que absorberá el de prácticas.
Según el acuerdo con Ciudadanos, la modalidad de contratación temporal con indemnización creciente establecía un incremento de la misma durante tres años, abonando 12 días el primer año, 16 el segundo y 20 el tercero.
La ministra ha asegurado que estas propuestas serán objeto de debate con los interlocutores sociales para su impulso en el marco del diálogo social en los próximos meses.
También ha propuesto reforzar el principio de causalidad en la contratación temporal, establecer el volumen de contratos de duración determinada, promocionar la contratación indefinida y la transformación de temporales en fijos.
Igualmente estudiará las jornadas de trabajo en España y reforzará la inspección de trabajo, y la igualdad laboral, mediante el fomento de la transparencia de las retribuciones, además de avanzar junto a patronal y sindicatos en la conciliación, racionalización y compatibilidad del trabajo con la vida personal.
La patronal esperará a conocer las propuestas definitivas del Gobierno en la mesa de diálogo social, pero ha dejado claro que las cotizaciones sociales son más altas en España que en otros países de su entorno europeo y que subirlas "es ir en una dirección equivocada".
Respecto a la reducción de los modelos de contratación, Rosell ha asegurado que "todo lo que sea simplificación de contratos le parece bien", pero que habrá que cuantificar "las derivadas".
"Las empresas contratan dentro de la legislación vigente", que puede "ser más permisiva o no", por lo que Rosell ha abogado por leyes claras, concretas y fáciles de entender.
Los sindicatos han visto con buenos ojos las medidas destinadas a limitar la contratación temporal, que cuenta con "tasas inaceptables" y afrontan el diálogo social desde una posición de voluntad y de acuerdo, pero también de exigencia y firmeza", ha dicho el secretario general de CCOO.
Para su homólogo de UGT, "estamos en condiciones de poder avanzar con elementos que nos permitan que la precariedad laboral comience a reducirse de manera considerable", que los salarios suban y avance la protección de los que no tienen derecho a percepciones por desempleo.
Respecto a la mesa del plan de choque por el empleo, la ministra ha asegurado que trabaja con los agentes sociales en la integración de los programas de parados de larga duración, para lo que se han puesto de margen el 30 de abril de 2018, así como la puesta en marcha de la tarjeta social universal para conocer la cobertura de cada persona y detectar las necesidades.
También quiere implementar el plan de choque de empleo juvenil, con medidas como el contrato relevo con la modalidad de jubilación parcial, la ayuda de acompañamiento o la bonificación para la conversión en indefinidos.
"Estamos en condiciones de poner en marcha el plan de choque por el empleo juvenil, hemos quedado en ultimar en las próxima semana", ha dicho.