"Las tensiones de liquidez nunca pusieron en riesgo el sistema financiero español, primero porque el importe no fue tan elevado y también porque se trató de instituciones con altos niveles de solvencia", ha asegurado Carbó en declaraciones a los medios.
En cualquier caso, el economista considera que la salida de depósitos "ya se ha estabilizado" y ha defendido que, tras una profunda reestructuración, el sistema bancario español es "mucho más solvente" que cinco años atrás.
Cuestionado por el traslado de la sede social de CaixaBank y Sabadell fuera de Cataluña, Carbó ha atribuido el movimiento a que ambas entidades quisieron asegurar su acceso a las líneas de liquidez del Banco Central Europeo (BCE) y garantizar así la confianza de sus clientes.
En este sentido, ha recordado que el sector financiero es "particularmente sensible" ante una falta de confianza, incluso cuando se trata de un tema "absolutamente distinto" al negocio bancario.
DUDAS ENTRE INVERSORES INTERNACIONALES
Por otro lado, el experto ha reconocido que la incertidumbre en Cataluña sí que ha generado "dudas" entre inversores internacionales. "Ha habido ruido entre inversores, no por un doble marco legal, sino por la incomodidad que podría ocasionar que hubiese dos oficinas intentando recaudar impuestos", ha sostenido Carbó.
A este respecto, el economista ha lamentado que "requerirá tiempo" recuperar la confianza de los inversores, pues, según ha apuntado, construirla requiere de años o muchos meses, mientras que su destrucción se produce "muy rápido".
Además, ha advertido de que el crecimiento de la economía española se verá afectado por la crisis en Cataluña, región que supone el 20% del PIB. "En el conjunto del país se notará menos, pero evidentemente sí que se notará", ha concluido.