Así, el precio de la vivienda presentó un incremento anual del 6,8 por ciento en el tercer trimestre del año, una aceleración de 2,4 puntos porcentuales frente a la tasa interanual del segundo trimestre.
Con la recuperación de los trimestres anteriores, el índice del precio de la vivienda se sitúa ahora un 22 por ciento por debajo de los máximos marcados en 2007.
El nuevo repunte de los precios de la vivienda se vio acompañado por un crecimiento de las compraventas de dos dígitos durante los meses de verano.
Entre julio y septiembre se inscribieron 119.156 compraventas en los registros, un aumento del 15,6 por ciento sobre el mismo periodo del año anterior.
"Es el resultado más elevado desde 2011", destacó el Colegio de Registradores en su nota de prensa.
Los extranjeros compraron unas 15.300 viviendas en el tercer trimestre, un 12,9 por ciento del total de las transacciones, ligeramente por debajo del 13,1 por ciento marcado en el primer y el segundo trimestre.
Los británicos mantuvieron su liderazgo habitual, representando el 14,8 por ciento de los compradores extranjeros, sin dar signos de un descenso de la demanda ante la depreciación de la libra y el Brexit en 2019.