Así se desprende de un informe sobre la situación del crédito y el crecimiento económico en Europa elaborado por Deustche Bank Research, en el que pronostica para España un alza del PIB del 3% este año, una décima menos que la previsión oficial del Gobierno.
El servicio de estudios de la entidad augura para el cuarto trimestre de este año un alza del consumo privado del 0,5%, un repunte del 0,9% de la inversión y un crecimiento similar para las exportaciones (+1%) y las importaciones (+1,1%).
De cara a 2018, estima un avance del crecimiento económico del 2,5%, lo que supone dos décimas más que la última previsión del Ejecutivo, después de que la rebajase del 2,6% al 2,3% por el impacto del desafío independentista.
A nivel europeo, vaticina un crecimiento del 2,2% este año y del 2% para el próximo ejercicio, y destaca que un aspecto clave en el reciente crecimiento de la zona euro es que ha llegado pese a una dinámica crediticia moderada, con un impulso del crédito más comedido en los últimos 18 meses que en 2015.
El informe señala que el crecimiento actual de la inversión probablemente podría durar hasta mediados de 2018 sin una aceleración material en el crédito, pero esta divergencia empezaría a corregirse a partir de esa fecha.
Además, subraya que la menor dependencia del crédito puede ayudar a aliviar las preocupaciones sobre la sostenibilidad de la recuperación, reduciendo así la presión sobre el BCE para que lleve a cabo un ajuste de la política monetaria como respuesta al fuerte impulso de crecimiento.