¿Puede tropezar Guindos con el Banco Popular desde la vicepresidencia del BCE?
La previsible llegada de Luis de Guindos al BCE ha abierto la posibilidad de que el ministro de Economía se 'tropiece' durante su etapa en el organismo con el caso Popular. Aunque en sus funciones de vicepresidente no tendría por qué toparse con la entidad, existe un caso en el que sí debería lidiar con este entuerto, según explican desde la institución monetaria.
9 febrero, 2018 11:57El pasado 7 de febrero, el ministro de Economía Luis de Guindos confirmaba su candidatura a la presidencia del BCE. Aunque no hay nada decidido, el propio Guindos se mostró confiado en contar con los apoyos necesarios para acceder al cargo, a pesar de las reticencias por su perfil político y, sobre todo, por su paso por el sector bancario desde Lehman Brothers al comité de auditoría de BMN, posteriormente fusionada con la intervenida Bankia. Sin olvidar, por su puesto, el caso Popular. Al fin y al cabo, el ha sido el ministro de Economía durante la caída y posterior resolución del banco.
Su más que probable acceso al BCE ha abierto las heridas de los demandantes, que ven cómo el funcionario pasaría ahora a formar parte del organismo que estudió y decidió la resolución del Popular, para mandar después su ejecución al FROB.
Sin embargo, el organigrama de la institución monetaria evidencia que no habrá incompatibilidades en este caso, ante el aluvión de demandas de los afectados contra la JUR y el propio BCE. Al menos en un principio.
Lo primero que hay que saber es que los altos cargos de la institución están divididos en dos ramas bien diferenciadas: la de política monetaria y la de supervisión bancaria, que recae en el Mecanismo Único de Supervisión, actualmente presidido por Danièle Nouy. Sería esta segunda rama la que podría verse implicada en las demandas del caso Popular.
Y ahí el ministro Guindos no entraría, pues sus funciones del día a día, tal y como explican fuentes del BCE, estarían más centradas en los estudios y decisiones de política monetaria. Salvo una excepción. Como vicepresidente del BCE, Guindos sería también uno de los seis miembros del Comité Ejecutivo de la institución. Y una de esas seis personas ocupa, por defecto, el cargo de vicepresidente del Mecanismo Único de Supervisión, quien tuvo el papel de advertir a la JUR de los problemas del Popular antes de la resolución. Actualmente, ese puesto lo ocupa la alemana Sabine Lautenschläger. Pero fuentes del entorno del organismo reconocen que los roles pueden cambiar, aunque no es probable que suceda en este caso.
Por lo tanto, no se puede descartar del todo esta posibilidad. Aún así, desde la institución insisten en que no creen que se de el caso, y que la única forma de que Popular suponga un obstáculo para la carrera de Guindos en el BCE, sería que saliesen adelante demandas contra el propio Ministerio de Economía, algo que ni ha sucedido ni se espera que suceda en los procesos judiciales abiertos en los últimos meses por los afectados.
Las fuentes consultadas explican, además, que otro de los roles del vicepresidente del BCE es formar parte de otro tipo de organismos como la Junta Europea de Riesgo Sistémico. Se trata de una institución externa, pero que trabaja codo con codo con el BCE y dentro de la misma sede ubicada en Frankfurt. ¿Esta institución se ocupa de la supervisión macroprudencial del sistema financiero en general, en ningún caso con detalles de entidades¿, explican desde el BCE.
Actualmente, las seis personas que forman el Comité Ejecutivo del BCE son el propio Mario Draghi, Vitor Constancio (a quien sustituiría Guindos), Benoit Coeuré, Yves Mersch, Peter Praet y la alemana Sabien Lautensdchläger, también vicepresidenta del Mecanismo Único de Supervisión. En principio, son designados para un mandato de ocho años no renovable y cada uno se ocupa de ciertos segmentos. Por ejemplo, Constancio se encarga actualmente de la parte de Estudios, segmento del que se ocuparía Guindos. Pero desde el BCE insisten en que puede haber restructuración de funciones para aprovechar la experiencia de los miembros del Consejo.
Entre las responsabilidades de estos, destacan la de preparar las reuniones del Consejo de Gobierno, poner en práctica la política monetaria e impartir las instrucciones necesarias a los Bancos Centrales de la zona del euro. Del mismo modo, se encargan de la gestión ordinaria del BCE con el apoyo del Director General de Servicios, Michael Diemer, así como ejercer los poderes que les hayan sido delegados por el Consejo de Gobierno, incluidos algunos de carácter normativo.