La rentabilidad del bono español al mismo plazo -cuya diferencia con el germano determina la prima de riesgo- también ha disminuido, pero en menor proporción, al situarse en el 1,232 %, respecto al 1,234 % de ayer.
En esta sesión se ha conocido que la balanza por cuenta corriente de la eurozona registró en 2017 un superávit de 387.600 millones de euros, lo que representa un 3,5 % del PIB, una décima menos que en 2016.
Hoy también se ha publicado que la tasa de ahorro de los hogares de los países de la zona euro aumentó dos décimas en el cuarto trimestre de 2017 y alcanzó un 12,2 %, frente al 12 % del trimestre anterior.
Fuera de la eurozona, los inversores han fijado la atención a la publicación de la tasa de paro de EEUU, que se mantuvo por sexto mes consecutivo en el 4,1 % en marzo con la creación de 103.000 empleos, un dato menor a lo esperado.
Washington también ha dado a conocer que el importe de los salarios subió en ocho centavos de dólar la hora el pasado mes, lo equivalente a un 0,3 %, el 2,7 % en el último año, lo que cuestiona la cuarta subida de tipos esperada por los expertos este año.
En el resto de los países considerados periféricos de la zona euro, la prima de riesgo italiana ha subido a 129 puntos básicos, dos más que el jueves, tras conocerse que la coalición de derechas -Forza Italia, Liga Norte y Hermanos de Italia- se presentará junta en la segunda ronda de consultas para intentar formar Gobierno.
Respecto a Portugal, el riesgo país ha escalado hasta 119 puntos básicos, respecto a los 115 anteriores, y el diferencial del bono heleno con el alemán ha aumentado hasta 351 puntos básicos, frente a los 348 previos.
El coste de los seguros de impago de la deuda española ("credit default swaps"), cantidad exigida para garantizar una inversión de 10 millones de dólares, se sitúa en 75.360 dólares, en tanto que por los italianos se pagan 157.800 dólares.