La agencia Moody's decidió subir ayer la calificación de la deuda a largo plazo de parte de la banca española, tras la mejora del 'rating' de España el pasado viernes. En concreto, ha revisado un escalón al alza el 'rating' del Santander y Bankia, elevando además la perspectiva de la calificación de BBVA y CaixaBank. En el caso de Banco Santander, la agencia mejoró su calificación hasta `A2¿, desde `A3¿ con perspectiva estable, por lo que se sitúa dos escalones por encima de la nota de España. Las acciones de la entidad que preside Ana Botín se despiertan hoy prácticamente planas.
En cuanto a Bankia, la nota pasa de `Ba1¿ a `Baa3¿ también con perspectiva estable por lo que su deuda deja de estar considerada como bono especulativo y pasa al grado de inversión. Así, los títulos del banco avanzan en la apertura de la negoaciación más de un punto porcentual y destacan entre los valores más alcistas del Ibex 35.
Estas mejoras de calificación se producen después de que Moody¿s mejorase el pasado viernes el 'rating' de la deuda soberana emitida por España un escalón, hasta `Baa1¿ con perspectiva estable.
Además, la atención se dirige a la batalla entre Iberdrola y Enel, el grupo italiano dueño de Endesa, para hacerse el control de la mayor distribuidora electricidad de Brasil, Eletropaulo. Después del acuerdo de inversión anunciado por el grupo que preside Ignacio Galán acuerdo de inversión para entrar en el capital de la compañía brasileña, en el que se compromete a suscribir la totalidad de la ampliación equivalente al 40,4% del capital social que la distribuidora emitirá en el marco de una oferta pública de suscripción, la italiana ha elevado la apuesta mejorando la oferta. En los primeros compases de la negociación, Iberdrola sube un leve 0,1% y consigue escapar del rojo que domina en el sector energético, el cual se sitúa a la cola del selectivo de referencia de la Bolsa española.
Fuera del Ibex 35, Grupo San José se frena tras experimentar ayer un repunte del 4,6% al calor de la 'Operación Chamartín'. El Ministerio de Fomento, el Ayuntamiento de Madrid y la promotora Distrito Castellana Norte anunciaron un acuerdo para dar luz verde al mayor proyecto urbanístico de Madrid tras más de dos décadas de bloqueo. El nuevo plan reduce la edificabilidad de los proyectos anteriores, con la construcción de 10.510 viviendas en el norte de la capital, 6.500 menos que las previstas inicialmente, un gran centro de negocios y la remodelación de la estación de tren. La citada compañía, que participa junto a BBVA en la sociedad promotora del proyecto, corrige tras el toque de campana un 0,7%.