Este esperado anuncio se ha producido a la vista de la fuerte depreciación acumulada por la lira en las últimas semanas y la insistencia de la comunidad internacional en medidas efectivas de choque. En este sentido, se persiguiría también garantizar la estabilidad de los precios, abriendo así la puerta a una subida del precio del dinero, situado en el 17,75%.
"Los acontecimientos recientes respecto de las perspectivas de inflación indican riesgos significativos para la estabilidad de precios", ha reconocido el instituto emisor del país otomano en un comunicado, después de conocerse que la tasa de inflación de Turquía registró en agosto una subida interanual del 17,90%, la mayor en 15 años.
En este sentido, el Banco Central de Turquía ha asegurado que "adoptará las acciones necesarias para apoyar la estabilidad de precios", por lo que adelantó que la posición de su política monetaria "será ajustada en la reunión de septiembre del Comité de Política Monetaria a la vista de los últimos acontecimientos".
Asimismo, la institución presidida por Murat Çetinkaya ha reiterado su compromiso de seguir haciendo uso de "todos los instrumentos disponibles" en pos de alcanzar su objetivo de estabilidad de precios.
El anuncio del Banco de Turquía ha llegado minutos después de que el Insituto de Estadística del país otomano haya anunciado que la tasa de inflación interanual turca alcanzó en agosto el 17,90%, frente al 15,85% de julio, lo que representa la mayor subida anual de los precios desde finales de 2003.
La mayor subida anual de precios durante el mes de agosto correspondió al transporte (+27,13%), por delante del mobiliario y artículos de hogar (+23,76%), los alimentos (+19,75%), los hoteles y restaurantes (+14,83%) y el ocio y cultura (+12,15%).
Por su parte, los precios de producción industrial de Turquía registraron en agosto una subida interanual del 32,13%, frente al alza del 25% del mes anterior. En comparación con el mes anterior, la inflación mayorista subió un 6,60%.
Esta subida de los precios a nivel general y mayorista tuvo su reflejo en el agravamiento de la caída de la actividad de las fábricas turcas, según el índice PMI manufacturero, que ha bajado a 46,4 puntos desde los 49 del mes anterior, encadenando su quinto descenso mensual consecutivo, según los datos publicados por IHS Markit y la Cámara de Comercio de Estambul.
El debilitamiento de la lira tuvo un efecto "central" en el empeoramiento de las condiciones de negocio en Turquía, contribuyendo a un fortalecimiento de las presiones inflacionistas. De hecho, los precios de los materiales y de los productos terminados registraron en agosto el mayor incremento desde que comenzaron los registros de la encuesta PMI en junio de 2005.
"Los eventos en los mercados de divisas tuvieron un gran impacto sobre el sector manufacturero turco, causando un repunte de las presiones inflacionistas y un difícil entorno de demanda", declaró Andrew Harker, directivo de IHS Markit, subrayando, por otro lado, el efecto positivo sobre las exportaciones turcas, que crecieron en agosto por segundo mes consecutivo.
La lira turca acumula una depreciación frente al dólar del 42,6% en lo que va de año, cotizando actualmente en 6,60 liras por cada 'billete verde', después de llegar a caer a mediados de agosto hasta las 7,2149 liras por dólar.