Con el descenso en julio, la deuda pública rompe la racha alcista de los tres meses anteriores y se modera ligeramente, tanto en términos absolutos como en porcentaje del PIB.

En términos interanuales, la deuda de las administraciones públicas creció en 29.655 millones de euros, un 2,6% más que en julio de 2017.

Tras el descenso de julio, la ratio de deuda sobre el PIB se situó en el entorno del 98,5%, por encima del objetivo marcado para este año del 96,8% del PIB.

A pesar del descenso de julio, los elevados niveles de deuda pública española preocupan, y mucho, a los organismos internacionales. También a las agencias de rating. La última en demostrarlo fue la agencia Fitch, que a finales de julio publicó un informe en el que advertía de que los altos niveles de deuda pública y de desempleo, que representan más del doble de la mediana de países con una calificación dentro de la categoría 'A', que equivale a un notable, representan una debilidad para la nota de solvencia de España, actualmente situada en 'A-' con perspectiva estable.

En este sentido, la calificadora de riesgos señalaba que la deuda pública española cerró 2017 en el 98,3% del PIB, una ratio muy por encima del 40,8% correspondiente a la mediana de países con calificación 'A', y además anticipa que esta se mantendrá en niveles muy similares en los próximos años, puesto que prevé una ratio del 97,8% para este año y del 96,5% en 2019 y del 95,2% en 2020.