El valor del barril usado como referencia por la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) -una canasta de quince tipos de crudo, uno de cada Estado miembro- ha mostrado una volatilidad moderada en la última semana, oscilando entre 76,09 y 77,31 dólares.

Su promedio semanal, de 76,71 dólares, superó en un 0,7% al de la semana anterior y prosiguió así con la senda alcista que mantiene desde mediados de agosto debido, sobre todo, al temor a eventuales problemas de suministro a raíz de las sanciones de EEUU a Irán.

Según los analistas, el viernes en los mercados se había creado cierta expectativa ante la reunión que la OPEP y sus aliados iban a celebrar el domingo, y se especulaba con algún aumento de la oferta del grupo después de que el presidente de EEUU, Donald Trump, les exigiera que hicieran algo para bajar los precios del petróleo.

"¡El monopolio de la OPEP debe bajar ahora los precios!", escribió Trump en un tuit el jueves.

No obstante, los ministros que participaron ayer en la cita en Argel, entre ellos los titulares de Arabia Saudí y Rusia, decidieron aplazar hasta diciembre cualquier decisión sobre una eventual modificación de los niveles de producción vigentes.

El barril de petróleo Brent, la referencia para Europa, reaccionó al alza a la noticia: tras la apertura hoy del mercado de futuros de Londres avanzaba hasta los 80,13 dólares, un 1,76% más que al cierre de la sesión anterior.