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El Ibex firma cuatro semanas bajistas y su racha en rojo más larga desde el Brexit a las puertas del 8.900

El último bandazo del Supremo ha salvado a los bancos del castigo en el que estaban sumidos. Sin embargo, el Ibex 35 no ha encontrado suficiente fuerza al cierre para recuperar los 8.900 puntos y suscribe su cuarta semana consecutiva en rojo.

19 octubre, 2018 07:06

El cambio de tercio en el Supremo ha tenido su efecto en la bolsa, pero no el suficiente para teñir de verde la semana del Ibex 35. El índice ha marcado último precio este viernes a las puertas del 8.900, incapaz de reconquistar esta cota. Con una mínima subida del 0,02% hasta los 8.892,1 puntos.

Así, a pesar de que no ha habido rastro del castigo reinante durante la mayor parte de la sesión, la semana ha culminado con caídas del 0,11%. Cuatro semanas consecutivas a la baja. Desde el Brexit no se encadenaba tanto rojo seguido en la bolsa española.

El sobresalto del día ha llegado de la mano del Supremo, que este viernes ha anunciado que revisará la sentencia sobre los impuestos a la banca para determinar si la mantiene y crea jurisprudencia. En los cruces más eufóricos tras este bandazo, el Ibex ha llegado a reconquistar el 8.900 y entrar en terreno semanal positivo.

Todo esto ocurría después de que en los cruces más bajistas se haya llegado a perforar la cota clave de los 8.800 puntos, con nuevos mínimos intradía de los últimos cuatro años: 8.768,6 ha llegado a marcar a media sesión negociadora. Dia (-1,7%), sin novedades de su plan estratégico y con rebaja de rating de Moodys, ha desandado el rebote que ayer jueves llevó a la cadena de supermercados a liderar la tabla de revalorizaciones del Ibex.

De un fuerte castigo a la euforia para acabar con templanza. Así ha sido la sesión de Banco Santander, que ha visto a sus acciones perder cerca de un 2%, entrar en terreno alcista y luego cerrar un 0,3% a la baja. Bankia, que ha llegado a colocarse al fondo y al frente del Ibex, ha completado la sesión con una mínima ganancia del 0,1% insuficiente para recuperar los 3 euros por acción.

BBVA se ha hecho fuerte en la recta final de la sesión después de una jornada de menos altibajos que sus compañeros de sector y ha firmado alzas del 1% para su gráfica. Bankinter, segundo del grupo en la tabla de revalorizaciones, ha ganado un 0,7% y lo mismo ha repuntado CaixaBank.

La euforia se ha reducido conforme se ha conocido que aún está por ver quién asume en adelante el pago del impuesto de actos jurídicos documentados (AJD) en la constitución de una hipoteca. Pero, también, por el otro golpe que este viernes recibía la banca: Credit Suisse ha rebajado los precios objetivos de Bankia, Sabadell y Santander en un duro informe hacia la banca mediana española. 

En la parte alta de la tabla de revalorizaciones, Viscofan ha liderado con avances del 2,5%, hasta los 62,1 euros por título. Segunda en liza, Red Eléctrica (REE), que ha hecho gala su carácter refugio con un rebote del 1,7%. Iberdrola ha completado el podio con avances del 1,6%. Telefónica se ha quedado a las puertas de reconquistar los 7 euros unitarios con un repunte del 1,4%.

La nutrida presencia de 'utilities' entre las posiciones más alcistas es fiel reflejo de la búsqueda de valores refugio por la que se decantan los inversores una vez que se confirman los peros de Bruselas a los presupuestos de Italia. Asimismo, la última remesa de datos macroeconómicos procedentes de China amargan el paladar de los inversores: el Gigante Asiático se enfrió en el tercer trimestre a su ritmo más débil desde la crisis financiera mundial.

En rojo, los peores comportamientos corresponden a ArcelorMittal (-3,9%), IAG (-3,6%) y Acerinox (-2,9%). Cie Automotive ha conseguido amortiguar el duro castigo que se imponía en el sector tras las débiles cifras trimestrales de Michelin hasta caer solo un 1% frente al 3% que ha rondado en algunos compases de la sesión.

El panorama se repite en el mercado secundario de deuda soberana, donde el bono español a diez años cotiza ya con una rentabilidad del 1,76% frente al 0,43% al que han caído los tipos que los inversores exigen al bono alemán. Así, la prima de riesgo asciende a 133 puntos básicos, si bien se llegan a marcar los 140 a media sesión.

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