En concreto, con el volumen vendido hoy en el mercado, la emisión de deuda del programa de financiación a medio y largo plazo alcanza los 127.128 millones de euros, lo que supone el 94,6% del objetivo previsto para 2018, que era de 134.300 millones.
Según los datos recopilados por Efe, en la puja celebrada en la jornada de hoy, el Tesoro ha logrado reducir el interés aplicado en las obligaciones a diez años, de las que ha venido 1.305 millones de euros.
Estas obligaciones han salido a un interés marginal del 1,624%, inferior al 1,649% aplicado en la puja previa.
Por el contrario, España ha tenido que elevar el rendimiento aplicado en las otras dos referencias subastadas hoy; obligaciones a quince años, y bonos con vencimiento de 2022 (vida residual de tres años).
Las primeras, de las que el Estado ha venido 1.006,9 millones, han elevado su interés hasta el 2,134%, desde el 1,978% anterior.
Por último, los bonos que vencen en 2022 (vida residual de tres años), de los que se han adjudicado 830,8 millones, también han salido a un rendimiento superior, del 0,322%, frente al 0,281% previo.
La subasta de hoy se ha celebrado en un nuevo contexto de incertidumbre entre los inversores ante la recta final de las negociaciones del Brexit, y la situación económica y política de Italia, enfrentada a la Comisión Europea por su Presupuesto.
En el día de ayer, la Comisión Europea consideró justificado abrir el procedimiento de déficit excesivo a Italia dada su elevada deuda pública y que el déficit estructural seguirá creciendo durante 2019 con los Presupuestos presentados por el país.
Sobre España, la CE advirtió de que el borrador de Presupuestos para el año que viene que ha remitido el Gobierno conlleva riesgo de incumplir las normas europeas de disciplina fiscal al no garantizar el ajuste estructural exigido ni reducir la deuda pública lo suficiente.
Para el analista de XTB Javier Urones, el Tesoro ha logrado hoy "sobreponerse a las dudas de Bruselas sobre las cuentas de España y sigue demostrando el interés que los inversores tienen por la deuda al conseguir reducir el tipo de interés exigido en un plazo tan relevante como es el de diez años".
El resultado de la puja, especialmente el de la deuda a diez años, "viene una vez más a confirmar el interés de los inversores extranjeros por hacerse con deuda española, y ayuda al Tesoro a encaminar el cierre de ejercicio con un sensible recorte en el interés medio de la deuda, que continúa a la baja", ha añadido.
No obstante, ha alertado de que ante el cercano final del programa de compra de deuda del Banco Central Europeo (BCE) "será interesante comprobar el comportamiento de la deuda española a partir de 2019 cuando no contará con este incentivo".
Con la subasta de hoy, el Tesoro ha conseguido colocar 6.100 millones de euros en esta semana, ya que el martes, adjudicó otros casi 3.000 millones en letras a tres y nueve meses, con unos intereses aún más negativos en las últimas.
Tras cerrar las subastas previstas en noviembre, el Tesoro volverá a apelar al mercado el próximo 4 de diciembre.