Durante su intervención en un desayuno de Nueva Economía Fórum, el veterano economista y político mexicano se refirió así al hecho de que la Comisión Europea prevea que el Gobierno no podrá reducir el déficit hasta el 1,8% en 2019, sino que como mucho quedará en el 2,1%.
Ha explicado que la OCDE ha revisado la base sobre la que se planteó el déficit del 1,8 % y considera que "los supuestos son razonables".
"Sin embargo, (...) si finalmente fuera el 2,1% yo diría 'dónde firmo', porque eso no va a descarrilar España", ha afirmado Gurría, que considera que lo importante es que el Gobierno "tenga las prioridades muy claras".
En cuanto al nivel de deuda pública, ha dicho que España está en el promedio de la OCDE, así que, aunque esto "no debe de dar tranquilidad a los españoles, tampoco es como para rociarse de gasolina y encender un zippo".
"No es que estemos haciendo la ola a España (...). Damos una breve palmadita en la espalda de 30 segundos y ahora a trabajar todos juntos en el crecimiento incluyente", ha bromeado.
Respecto a la "importante coste e incertidumbre" que está generando que el Gobierno español aún no haya podido aprobar sus cuentas para 2019, ha dicho que "los presupuestos se hacen para ser aprobados y no para generar debates".
Sin embargo, ha apuntado que el retraso en su aprobación "no va a paralizar la economía" porque hay instituciones que "todos los días siguen dando sus resultados y el país sigue adelante".
"Un presupuesto es también una expresión de la dirección de la política económica", ha defendido igualmente para valorar la "dirección" que muestran las cuentas propuestas por España, que son "la primera expresión organizada y estructurada de lo que son las prioridades, preferencias y directivas de su política económica".
Ha añadido que la fragmentación política es un fenómeno que se está produciendo en toda Europa y que hay que aprender a "vivir" con la necesidad de alcanzar pactos políticos en los parlamentos.
A su juicio España lo está "haciendo mejor que otros países" en un contexto internacional de "paulatina pero ya muy evidente ralentización del crecimiento".
Según Gurría, "se materializaron todas las amenazas en un plazo muy corto, sobre todo en materia de comercio", lo que ha llevado a la OCDE a rebajar en medio punto sus previsiones de crecimiento mundial respecto a hace tan sólo seis meses.
Sin embargo, para España la revisión a la baja ha sido de dos décimas, "así que tampoco es para rasgarse las vestiduras", ya que las exportaciones siguen creciendo y se crea medio millón de empleos anuales.
Gurría fue presentado en el acto por la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño, que tuvo que irse en seguida para acudir al Consejo de Ministros, para el que el político mexicano le deseó "buena suerte", ya que "son días complicados" para el Gobierno español.