La economista jefe de Deutsche Bank en España, Rosa Duce, ha señalado que el crecimiento en España está frenándose de la misma manera que sucede en el resto de economías europeas, debido principalmente al sector exterior, que se ve penalizado por la guerra comercial a nivel mundial, y a que el peso del turismo se ha visto ligeramente reducido frente a niveles récord en 2017 por la mejor situación de países vecinos.

En este contexto, ha asegurado que "no va a haber recesión ni de lejos", a pesar de que en 2019 la economía tendrá probablemente un sector exterior deficitario y una economía doméstica que seguirá creciendo, pero no al mismo ritmo que en años anteriores.

Duce también ha descartado la posibilidad de que tenga lugar una nueva burbuja inmobiliaria, debido a que los precios están subiendo, pero se mantienen lejos de los de hace diez años, la demanda de vivienda es menor y las condiciones de concesión de crédito no son las mismas.

El responsable de Renta Variable del Centro de Inversiones de Deutsche Bank España, Diego Jiménez-Albarracín, ha presentado las estrategias de inversión de la entidad para el próximo año, donde la preferencia son las Bolsas europeas, las asiáticas y después las europeas.

Respecto a la española, Jiménez-Albarracín ha señalado que se trata de "la gran decepción", ya que no refleja la situación de la economía española incluso cuando crece por encima de su potencial. En su opinión, esto se debe a que los sectores financiero, eléctrico y de telecomunicaciones aglutinan el 70% de la capitalización del Ibex 35 pero tienen gran parte de su negocio en otros países, por lo que también se ven contagiados por las incertidumbres a nivel global.

En cuanto al sector financiero, la inestabilidad le penaliza a pesar de sus grandes esfuerzos en eficiencia, saneamiento de balance, mejora de márgenes y rebaja de morosidad, lo que se traduce en mejores resultados pero no en subidas en Bolsa.

"Si los bancos italianos caen, los españoles también, porque las grandes gestoras de fondos que se van de Italia se van de España e incluso de Europa", ha explicado. En este sentido, el responsable de Renta Variable del Centro de Inversiones de Deutsche Bank España espera que esta situación se revierta si prospera el "atisbo de tranquilidad" que se ha visto en las últimas semanas por los acercamientos entre Italia y Bruselas o sobre un acuerdo del 'Brexit'.

Respecto a la composición de sus carteras de inversión, Deutsche Bank continúa apostando por "empresas de toda la vida" como Repsol, Telefónica, Inditex y Santander, así como por algunas más novedosas como Cellnex o Amadeus. En EE.UU., vuelven a confiar en el sector tecnológico, el financiero y el de la salud.

LA ECONOMÍA MUNDIAL CRECERÁ UN 3,5% EN 2019

Por otro lado, Deutsche Bank considera que no habrá recesión en la economía mundial en 2019, aunque anticipa que sí se producirá una desaceleración. Así, prevé que la economía mundial crezca por encima del 3,5% durante el próximo año a pesar de factores de riesgo como la guerra comercial entre Estados Unidos y China, el 'Brexit' y el desafío presupuestario italiano.

Según Rosa Duce, la probabilidad de una recesión mundial es actualmente inferior al 10% y la tendencia de la economía va a seguir siendo de expansión, a pesar de que algunos sectores pueden sufrir "cierto debilitamiento" por el impacto de la subida de tipos.

En este sentido, destaca la economía estadounidense, que seguirá creciendo. "La confianza empresarial, en niveles cercanos al 60, es el reflejo de un mercado de trabajo muy positivo, donde el empleo sigue creciendo mes a mes y los salarios empiezan a repuntar", ha explicado.

En Europa, la situación es "más complicada" por temas políticos y lo normal sería que volviese a niveles en línea con su potencial. "Lo que está fallando es el sector exterior, la guerra comercial nos ha pillado en medio y en casi todos los países vemos que aunque la demanda doméstica no se está comportando mal, lo ligado a la exportación se está viendo castigado", ha apuntado Duce.

Aunque Italia es "un foco de preocupación", los responsables de Deutsche Bank España confían en que el Gobierno del país llegará a un acuerdo con Bruselas que sitúe el objetivo de déficit entre el 2% y el 2,5%, una cifra "razonable" para las autoridades europeas, que "no quieren abrir un procedimiento de déficit excesivo a ningún país".

Por último, ha señalado que los países emergentes han sufrido por las tensiones comerciales, pero los inversores no han valorado sus fundamentales. "Venden a saco y da igual que sea un país bueno o malo, todas las tensiones comerciales con China han penalizado el entorno y la realidad es que la situación económica de esos países sigue siendo muy buena", ha apuntado.

Respecto a estrategias de inversíón, la entidad apuesta por la diversificación tanto por tipo de activo como geográfica. Para renta fija, prefieren renta fija emergente, mientras que consideran que en renta variable "las bolsas no están recogiendo la situación económica y empresarial", si bien prefieren la americana a la europea por la volatilidad.