La fragmentación del voto en las elecciones de este domingo deja pocas pistas de por dónde podría ir el programa económico del nuevo Gobierno. Sin embargo, los inversores se decantan por dar un respiro al sector financiero y penalizan a las eléctricas. No obstante, la peor parte se la lleva la papelera Ence.
A falta de que se concreten eventuales alianzas para la formación de un nuevo Gobierno liderado por Pedro Sánchez, los inversores consideran que el sector energético es el que podría estar más expuesto a cambios regulatorios. No es de extrañar, dada la importancia que el PSOE -y también sus posibles socios de Unidas Podemos- ha dado al tema de la transición hacia fuentes renovables y en maniobras para reducir la factura de la luz. Y se nota en la bolsa.
La más penalizada ha sido Iberdrola, que ha caído un 1,37% hasta perder los 8 euros por acción. Acciona (con una parte muy importante de su negocio en energía) ha logrado esquivar la caída de primera hora y ha cerrado plano. Endesa ha cedido un 0,8% y Red Eléctrica, compañía en la que la firma de inversión estatal SEPI tiene una participación del 20%, ha visto adelgazar su capitalización un 0,3%.
Las compañías de gas natural Naturgy y Enagás se han dejado un 0,6% y un 0,04% respectivamente al encajar el escrutinio que refuerza al PSOE en el Congreso, aunque sin un aliado clave, y hunde al PP de Pablo Casado.
Al otro extremo, las renovables dominan en el Mercado Continuo con ganancias que tocan incluso el doble dígito porcentual. Las que más suben tson Audax Renovables, un 20% al alza, y Solaria, con subidas del 9,41%. Ambos valores han sido de los más beneficiados en bolsa durante la legislatura de Sánchez, en la que se ha puesto fin al conocido como 'impuesto al sol' para potenciar el autoconsumo y la generalización del uso de la energía verde. Sin embargo, la fabricante de turbinas eólicas Siemens Gamesa solo ha logrado ganar un 0,3%.
A pesar de la sonora caída de las eléctricas, el castigo a Ence ha sido mucho mayor: sus acciones han perdido un 4,78%. No es de extrañar si se considera que el Gobierno de Pedro Sánchez optó por retirar su apoyo a la papelera en la prórroga a la concesión de terrenos para su fábrica en la ría de Pontevedra, una de sus plantas clave. La posibilidad de que el inquilino de La Moncloa proviniese de unas siglas distintas a las socialistas había abierto la puerta a un posible respaldo a este permiso, escenario que ahora queda completamente frustrado.
EL ESCENARIO FAVORITO DEL 'FINANCIAL TIMES'
Mientras tanto, la banca parece celebrar que se ha cumplido el escenario por el que se habían decantado como más favorable para los negocios algunas grandes gestoras globales de inversión y varias cabeceras de prensa especializada, como ‘Financial Times’. Esto es la confirmación del PSOE como primera fuerza política y el liderazgo de Ciudanos fuera de los partidos del bipartidismo. Y eso que el impuesto a la banca que el Gobierno había aparcado en sus fallidos Presupuestos Generales del Estado vuelve ahora a tomar cuerpo de cara a las negociaciones que puedan surgir para la formación de un nuevo Ejecutivo.
El foco dentro del sector se va a Bankia. Y por doble motivo. En primer lugar, la entidad ha publicado sus cuentas del primer trimestre del año, en las que refleja un beneficio de 205 millones, un 10,8% menos que en el mismo periodo del ejercicio pasado. Segundo, porque un 60,6% de su capital sigue en manos del Frob y los hipotéticos socios de Gobierno de Unidos Podemos quieren que este porcentaje no se privatice, sino que sea el germen para la creación de una banca pública en España.
Con todo, la entidad se coloca al frente del índice con una subida del 2,9%. Más de un 2% se han apuntado también CaixaBank y Sabadell, que ha recuperado el euro por acción. Más cautos han sido los inversores con BBVA, que ha repuntado un 0,9% a la espera de que al cierre de la sesión de este lunes publicase unos resultados trimestrales que arrojan un beneficio un 9,8% inferior al de hace un año.
La gestora aeroportuaria Aena, donde el Estado controla un 51% del capital a través de Enaire, se queda plana en esta jornada de digestión de resultados electorales, apenas un 0,03% arriba. Mientras tanto, Indra, la compañía encargada de la gestión de datos de estas Elecciones y que cuenta con SEPI como dueña de un 5% de sus acciones, ha logrado repuntar un 0,38% al cierre de sesión pese a haber abierto en rojo.