La historia se repite. Los bancos centrales vuelven a actuar de ‘colchón’ para los mercados financieros y la perspectiva de una inminente bajada de tipos por parte de la Reserva Federal (Fed) ha llevado a Wall Street a superar nuevos máximos que pocos podían imaginar al cierre del primer trimestre, tras despedir marzo con subidas acumuladas de doble dígito en el mercado.
El Dow Jones despidió la pasada semana por encima de los 27.300 puntos, el S&P 500 conquistó los 3.000 puntos y el tecnológico Nasdaq superó por primera vez los 8.200 puntos. Una subida imparable en la que muchos empiezan a ‘oler el peligro’ de las valoraciones, ante el temor del posible final del ciclo expansivo más largo de la historia de EEUU.
En este entorno, esta semana será crucial para comprobar si los fundamentales de las cotizadas en Wall Street son capaces de acompañar a Jerome Powell como propulsores de las subidas. Sobre todo porque muchas de las empresas que rendirán cuentas en los próximos días pertenecen al sector tecnológico, afectado por las tensiones comerciales entre EEUU y China, y también al sector consumo.
Después de que Citigroup inaugurase el lunes la temporada con un incremento del 7% en su beneficio del segundo trimestre –por encima de lo esperado-, el mercado espera ahora la avalancha de cifras de otros grandes valores como JP Morgan, Goldman Sachs o Wells Fargo (que presentan este mismo martes), además de otros gigantes como Alcoa, Johnson & Johnson, AngloAmerican, Bank of America, IBM, Netflix, eBay o Microsoft.
CUIDADO CON LOS ‘PROFIT WARNING’
Esta nueva temporada de resultados llega en un ambiente enrarecido. Sobre todo porque, según datos recopilados por Marketwatch, más de 80 compañías que forman parte del S&P 500 ya han advertido de que sus cuentas del segundo trimestre serán más ‘flojas’ de lo previsto. Entre ellas, gigantes como Adobe, Honeywell o Netflix, que en abril ya dejó claro que registraría un crecimietno de suscriptores por debajo de lo esperado.
Los analistas de Renta 4 Banco recuerdan que, como ya se ha visto en Europa con las rebajas de previsiones de Basf o de Daimler, “el mercado penaliza con fuertes caídas a quienes no cumplen las expectativas”.
Hay que tener en cuenta que, siguiendo la tendencia de los últimos meses, los analistas tienden a ser muy conservadores con sus previsiones, provocando que sea más fácil para las empresas batir sus expectativas. En el primer trimestre, por ejemplo, el consenso anticipaba caídas del beneficio del 4% de media para Wall Street. La cifra, finalmente, fue del 0,3%.
De hecho, de las 24 compañías del S&P 500 que ya han presentado sus cuentas (hasta el cierre del pasado viernes), 20 han batido previsiones. Ahora, el consenso espera una caída del 3% en el beneficio de las cotizadas estadounidenses, la peor cifra desde el segundo trimestre de 2016 y el segundo trimestre consecutivo de descenso en los beneficios para Wall Street.
ATENTOS A LOS DATOS DE FINAL DE AÑO
Los analistas insisten en que lo más importante no serán las cifras de estos seis primeros meses del año, sino el ‘guidance’ que presenten las compañías. “El mercado espera un crecimiento del beneficio por acción del 4,47% para el conjunto del año, por lo que las previsiones para la segunda mitad serán determinantes”, indican desde Andbank.
De hecho, desde Renta 4 Banco no descartan que, si las previsiones de las empresas son muy negativas, la nueva temporada de resultados “pueda hacer descarrilar este mercado alcista que flota en el dinero gratis perpetuo”.
Además de las tecnológicas, que han sido la verdadera gasolina para las subidas hasta el cierre de junio, la banca es la gran protagonista de estos días. El sector ha marcado notables diferencias –para bien- respecto a sus competidores europeos en estos últimos seis meses, a pesar de la esperada rebaja de tipos de interés de la Fed. Tras sumar una revalorización del 38% en lo que va de año, Citigroup presentó el lunes unas cuentas que batieron las previsiones del consenso.
Este martes será el turno de Goldman Sachs, que sube más de un 28% en bolsa este año, además de JP Morgan, que suma avances de más del 15%. A ellos les seguirán Wells Fargo y Bank of America, también en positivo en 2019. “Hay que vigilar de cerca sus ingresos por el negocio de trading”, advierten los expertos.
Si los resultados son peor de lo esperado, a los inversores les quedará el consuelo de la bajada de tipos en julio. Pero puede que ese movimiento ya esté descontado. Habrá que ver entonces si los fundamentales de las empresas son capaces de alimentar, por sí mismos, el periodo alcista más largo de la historia de Wall Street.