El desplome de las bolsas no tiene freno y se contagia de unas plazas a otras. Wall Street toma el relevo bajista de este lunes y sus índices de referencia caen a plomo, de manera que llegan a perforar algunas de sus cotas psicológicas más relevantes. La determinación de la Reserva Federal en apoyar la economía con nuevos estímulos no es suficiente para frenar el descalabro.
Los tres grandes índices de la Bolsa de Nueva York arrancaban con caídas de más del 7% que después han moderado al entorno del 5% para alivio de los descensos en Europa. El Dow Jones se deja de una tacada cerca de 2.000 puntos y llega a cotizar por debajo de los 24.000 enteros. El tecnológico Nasdaq se despide de los 8.000 puntos y el S&P 500 ha llegado a estar inhibido durante 15 minutos por la avalancha de órdenes vendedoras mientras se desliza por debajo de los 2.800 puntos.
De poco sirve que antes de la apertura de la sesión se haya conocido que la Reserva Federal de Nueva York aumentará la cantidad de préstamos a muy corto plazo que viene ofreciendo para acuerdos de recompra o repo. Concretamente, en 50.000 millones de dólares, hasta los 150.000 millones.
El desplome del petróleo, con el barril Texas de referencia en EEUU por debajo de los 33%, alcanza la cotización de las grandes compañías del sector. Chevron y Exxon Mobil se dejan cerca de un 15%, mientras que ConocoPhillips extiende el desplome al 26% de su capitalización.
La tecnológica Twitter logra amortiguar en parte las caídas, que alcanzan el 4%. Todo es gracias a que ha anunciado la entrada de la firma de inversión Silver Lake con 1.000 millones de dólares en su capital a través de la compra de deuda. Junto con esta medida se ha anunciado también un programa de recompra de títulos propios por hasta 2.000 millones de dólares. El codirector ejecutivo de la firma inversora, Egon Durban, y el socio de Elliot Management, Jesse Cohn, entrarán en el consejo de administración de la red social.
Los retrocesos se quedan también en el entorno del 4% en Willis Towers Watson, cuya compra ha sido acordada con la firma de servicios profesionales Aon por 29.861 millones de dólares. Cada accionista de la consultora recibirá 1,08 acciones de Aon (-9%) por cada uno de sus títulos. Esto implica una valoración de 231,99 dólares por acción y una prima del 16,2% con respecto a la cotización registrada al cierre del viernes.
Por el sector financiero, el foco va para Wells Fargo después de conocerse que su presidenta Elizabeth Duke ha presentado su dimisión junto con James Quigley, que también formaba parte del consejo de administración del banco. Ambos han asegurado que su retirada tiene por objetivo para facilitar la transición hacia una nueva etapa después de varias sanciones por la detección de malas prácticas generalizadas en la entidad. Sus acciones caen más de un 9% en la bolsa neoyorquina.