La huida inversora de este lunes ha tenido una sola dirección de destino: la renta fija. Más concretamente, los bonos soberanos alemanes y estadounidenses. La estampida ha sido tal que la prima de riesgo española ha vuelto a superar los 100 puntos básicos después de diez meses por debajo de esta cota.
Solo en la sesión de este lunes, la prima de riesgo de los bonos españoles, que mide la diferencia entre la rentabilidad de estos papeles y los alemanes en el mercado secundario, ha engordado en 18 puntos. Hasta los 112 enteros.
Este incremento es fruto principalmente de la drástica caída de rentabilidad que han experimentado los bonos germanos en los que el mercado ha buscado refugio, ya que los papeles españoles alcanzan el cierre de sesión con tipos del 0,23%, sin grandes cambios con respecto a las últimas sesiones.
La avalancha de órdenes de compra de deuda alemana ha conducido al ‘bund’ de referencia hasta el -0,88% en contra de sus tenedores. Nuevo mínimo histórico en los costes de financiación a una década para las arcas públicas alemanas.
El panorama se ha repetido en los bonos de EEUU a diez años. En el mercado secundario, los conocidos como ‘treasuries’ han visto su rentabilidad descender hasta el 0,50%, una marca que también supone mínimos históricos para su gráfica. Sin embargo, la temida inversión de la curva de tipos está lejos de producirse, pues los papeles estadounidenses a dos años se quedan en un 0,377%.
Grecia supera los 270 puntos
De regreso a Europa, también los bonos de Dinamarca (-0,83%), Finlandia (-0,49%), Francia (-0,39%), Holanda (-0,66%), Irlanda (-0,15%) y Suecia (-0,53%) cotizan en negativo. Mención aparte para Suiza, en el -1,10% a favor de su tesoro.
La prima de riesgo italiana ha escalado este lunes hasta los 225 puntos básicos, pues a los papeles a diez años del país transalpino se les exige una rentabilidad del 1,38%. En el caso de Grecia, con un 1,89% de rentabilidad, la brecha frente a los alemanes alcanza los 276 puntos.