El desplome de la renta variable a consecuencia de la expansión del coronavirus ha provocado la huida de muchos inversores. Un escenario ante el que Olivier Becker, director de convertibles de Oddo BHF, considera que estos títulos híbridos de renta fija se convierten en una opción atractiva.
“Los bonos convertibles son muy apropiados en el entorno actual, cuando hay más incertidumbre”, destaca Becker. En este sentido, subraya que “el coronavirus está añadiendo más incertidumbre que nunca”, mientras que “los bonos convertibles tienden a desempeñar realmente su papel de capturar una buena parte de las subidas en renta variable, limitando el lado negativo de cualquier mercado potencialmente bajista”.
En el mercado español, sus dos posiciones de “convicciones importantes” son Cellnex e Iberdrola. En ambos casos, el experto de Oddo BHF subraya que “tuvieron un extraordinario efecto positivo en la rentabilidad a lo largo de los últimos doce meses”. Además, insiste en que “son dos valores que tenemos desde hace varios años en cartera”.
Otras compañías cuyos convertibles están en el radar del experto son Deutsche Wohnen, MTU Aero Engines, Airbus y Worldline.
Becker señala que existen tres categorías de bonos convertibles. En primer lugar, los perfiles de equilibrados con la sensibilidad de la bolsa entre el 13% y el 17%. Después, los bonos convertibles más similares al crédito y una sensibilidad con respecto a la renta variable muy limitada. Por último, los más similares a la renta variable, con mucha sensibilidad a este mercado.
Su estrategia es “jugar con instrumentos vainilla y elementos balanceados para conseguir resultados atractivos que puedan captar una buena parte del mercado alcista en renta variable y limitar el riesgo”, según comenta.