Es difícil describir la situación que los mercados financieros globales están viviendo estos días de pánico vendedor entre los inversores. Hace apenas unos meses, el consenso de analistas daba por hecho que el ciclo alcista más largo de la historia aún podía estirarse un poco más.
Pero sus previsiones se han ido al traste con el cisne negro en el que se ha convertido el miedo al impacto económico del coronavirus. El Ibex 35 prolongó este jueves su racha bajista y se despeñó un 14% en la peor sesión de toda su historia. Es decir, la pandemia que asola al mundo ha arrebatado al brexit el dudoso honor de ser la referencia para los peores días del mercado.
La fuga descontrolada de inversores hacia activos refugio ha dejado tiritando al selectivo español. Sus empresas valen hoy 22.700 millones de euros menos de lo que valían al arrancar la sesión del pasado 24 de febrero, cuando el cundió el pánico tras las primeras medidas restrictivas en Italia.
Jornadas para el olvido
En concreto, el Ibex se ha dejado un 35,5% en 14 sesiones de infarto en las que sus cotizadas han pasado de tener un valor conjunto de 625.709 millones de euros a quedarse al borde de los 403.000 millones. En esta sangría bursátil, ArcelorMittal, IAG y Banco Sabadell han sido los mayores damnificados, con pérdidas que se acercan al 50% en estas tres últimas semanas.
Toda la bolsa española cotiza en rojo en el periodo analizado, y solo Viscofan y MásMóvil aguantan con pérdidas más moderadas del 12% y del 20%, respectivamente.
Las caídas superan el 30% para prácticamente el resto de valores, con el principal foco en los más ligados al turismo y al sector bancario. Este último golpeado además por la perspectiva de que el Banco Central Europeo (BCE) mantendrá los tipos de interés negativos durante más tiempo del esperado.
Desde el fatídico 24 de febrero, las caídas acumuladas por Bankia y BBVA también superan el 40%, mientras que Banco Santander se deja un 39% con su cotización muy lejos ya de los 2,5 euros por acción. El banco comandado por Ana Botín ha pasado de capitalizar más de 62.000 millones de euros a valer, al cierre del jueves, 37.700 millones.
Valores en mínimos
Repsol o Telefónica también cotizan en mínimos históricos. La operadora ha perdido 11.000 millones de euros de capitalización en estas semanas hasta dejar el precio de sus acciones en 3,8 euros, lo que implica una capitalización inferior a los 20.000 millones.
De hecho, ese umbral de los 20.000 millones apenas lo superan ya solo cuatro valores: BBVA, Santander, Iberdrola e Inditex. Aunque son precisamente estas cotizadas las que han perdido un mayor volumen de valor en bolsa, entre los 15.000 millones que se deja el banco presidido por Carlos Torres y los 32.700 millones de la empresa textil.
La sangría bursátil también ha provocado que 16 de las cotizadas del índice valgan ya menos de 5.000 millones de euros. Y hasta tres valores del selectivo, Ence, Meliá y Mediaset, capitalizan por debajo de los 1.000 millones de euros. En el caso concreto de la papelera, su desplome del 37% en estas semanas ha dejado su valor en bolsa en apenas 554 millones de euros, al mismo nivel que empresas del Mercado Continuo como Dia o Talgo.