La volatilidad sigue siendo un ingrediente ineludible de los mercados en este arranque del segundo trimestre del año. Un factor que complica la definición de estrategias de inversión oportunistas en la bolsa y que lleva a Sasha Evers, director general de BNY Mellon Iberia, a aconsejar “cautela en el corto plazo”.
Ante el actual contexto de mercado, el experto de BNY Mellon explica que “hay oportunidades en acciones de crecimiento de calidad”, que define como aquellas con “niveles muy bajos de endeudamiento” que incluso en este entorno “son capaces de ir generando efectivo”. Como parte de su estrategia, también aconseja no dejarse llevar por el pánico y vender indiscriminadamente.
Evers aconseja “fijarse en Italia” para ver cómo va saliendo de la crisis del coronavirus. No obstante, desde la firma de inversión para la que trabaja contemplan una recuperación en ‘V’ que dé inicio “en la segunda mitad del año”.
Antes bien, reconoce que “es difícil saber exactamente cuál va a ser el impacto del coronavirus en el tiempo” por la incertidumbre que rodea la evolución de la enfermedad y la ausencia de registros históricos comparables.
A los inversores de perfil más rentista, avisa: “Hay que tener cuidado con los dividendos porque hay sectores que los están reduciendo de forma agresiva”. Y no solo en banca. Advierte de que en sectores como el turismo cada vez más compañías optan por esta opción para preservar liquidez.
Por lo que se refiere a la renta fija, su preferencia está en bonos corporativos de grado de inversión, ya que “los bancos centrales están apoyando esta parte del mercado tanto en EEUU como en Europa” y frente a los soberanos “ofrecen unos diferenciales muy interesantes”. “Nos parece una forma de invertir relativamente conservadora que ofrece unas rentabilidades interesantes”.
El tono cambia al hablar de deuda emergente en divisa local, donde asegura que BNY Mellon “tiene más cuidado”.