Wall Street alcanza el ecuador de la semana teñido de rojo por el pesimismo sobre el futuro a corto plazo. Un día después de haber tocado máximos, el S&P 500 ha acompañado al Dow Jones y al Nasdaq cerrando en negativo. El retraso en la llegada de nuevos estímulos para la mayor economía del mundo impiden la continuidad de la euforia.
El Dow Jones ha cerrado con una caída del 0,3%. Mientras, el S&P 500 se ha dejado un 0,44% después de coquetear durante parte de la sesión con lo verdes. Por último, el Nasdaq ha sido el selectivo más castigado con un descenso del 0,71%.
Y es que, las previsiones no son buenas para el año que viene. La presidenta demócrata del Congreso, Nancy Pelosi, ha asegurado en una entrevista en el medio especializado Politico que las negociaciones para el establecimiento de ayudas al desempleo están ahora en punto muerto, si bien se ha mostrado dispuesta a que se retomen y avancen con urgencia. Además, el presidente Donald Trump ha asegurado que las conversaciones con China en materia comercial han sido suspendidas desde la Casa Blanca.
Este es el escenario ante el que el Nasdaq repliega velas, pues las tecnológicas podrían estar entre las grandes perjudicadas por una nueva escalada arancelaria entre China y EEUU.
La tensión con China va a más después de que el Departamento de Estado haya advertido a las instituciones educativas de EEUU de la necesidad de que planteen la venta de sus acciones de cotizadas en Wall Street domiciliadas en el país asiático por el riesgo de que se produzca una orden presidencial que decrete su exclusión, según ha publicado Bloomberg.
El mazazo para la sesión ha llegado de la mano de la FED. El banco central estadounidense ha puesto sobre la mesa unas crudas previsiones para los próximos meses. Según su criterio, la crisis del coronavirus va a seguir impactando tanto en la economía como en el empleo de Estados Unidos.
J&J compra Momenta
En lo corporativo, Johnson & Johnson se sitúa en la picota tras haber anunciado la compra de la biotecnológica Momenta Pharmaceuticals por 6.500 millones de dólares en efectivo, lo que supone 52,5 dólares por acción y una prima del 70,4% respecto al cierre de ayer. Con este movimiento, el grupo estadounidense de salud e higiene personal entra en el segmento de las enfermedades autoinmunes, en el que está especializado la cotizada.
Las grandes cadenas de distribución minorista siguen siendo protagonistas del desfile de resultados. Target ha dado a conocer un beneficio por acción de 3,38 dólares, un 85,7% superior al de hace un año. Al término de su segundo trimestre fiscal, ha dado cuenta de ingresos por 22.976 millones de dólares, sensiblemente por encima de los 20.000 millones que aguardaba el consenso de los analistas, gracias al impulso del canal online.
Por su parte, Lowe’s ha dado a conocer cifras trimestrales récord gracias a un fuerte aumento de la demanda de productos de bricolaje y decoración. En su escaparate digital, las ventas se han duplicado, mientras que en sus establecimientos físicos se han incrementado un 35,1% en términos comparables incluso a pesar de semanas de cierres forzosos. En total, ingresos de 27.302 millones de dólares frente a los 25.000 millones que, en el mejor de los casos, aguardaban los expertos.
BlackBerry vuelve, Apple bate récords
En el sector tecnológico, Oracle se mantiene bajo el foco después de haber conseguido el apoyo de la Administración Trump para hacerse con el negocio en EEUU de la red social china TikTok. La compañía se ha postulado para esta operación como ya había hecho anteriormente Microsoft.
Los inversores también siguieron con atención a BlackBerry, que ha anunciado su regreso en 2021 con teléfonos inteligentes con teclado físico. El nuevo propietario de la legendaria marca, OnwardMobility, ha anunciado que volverán los teclados QWERTY, origen de la fama que estos terminales adquirieron porque permitían escribir documentos a gran velocidad.
Por último, pero no menos importante, Apple ha vuelto a hacer historia al superar los 2 billones de dólares de capitalización bursátil. Es el equivalente a dos veces el PIB español, cota que no ha podido mantener al cierre pero que ha superado al rebasar por primera vez en su trayectoria los 467,77 dólares por acción en Wall Street.