Cinco días después de haber abandonado el consejo de Banco Sabadell, José Luis Negro salió de compras. Unas adquisiciones que han visto la luz gracias a que, a pesar de su dimisión, sí que mantiene su puesto como director general en la entidad.
Así consta en la documentación remitida por José Luis Negro a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En virtud de este cargo de responsabilidad, el exconsejero sigue obligado a notificar las operaciones de compraventa que lleve a cabo con acciones del Sabadell. Incluso sin formar parte ya del órgano rector de la entidad.
El pasado 29 de septiembre, apenas cinco días después de haber presentado su dimisión del consejo con efectos inmediatos, Negro se hizo con 141.322 acciones del banco vallesano. Por cada una de ellas pagó 0,28 euros, según consta en la documentación remitida al supervisor. De ambas cifras se desprende que la inversión total alcanzó los 39.570,16 euros.
Jubilación en 2020
De momento, Negro se mantiene en activo en la entidad, pero en la misiva en la que presentó su renuncia mostraba su intención de jubilarse antes de fin de año, según se publicó entonces. En su ficha en la web corporativa del Sabadell figuraba como interventor general y vocal en la comisión ejecutiva, así como en la de control de riesgos. Con efectos simultáneos a su dimisión, fue reemplazado en el consejo por la independiente Alicia Reyes Revuelta.
Anteriormente, en este año del coronavirus, el ya exconsejero había salido una vez más de compras por el capital del Sabadell. La operación se celebró el 4 de marzo, cuando el impacto de la pandemia en la economía global comenzaba a vislumbrarse. En aquella ocasión, la inversión alcanzó los 53.492 euros a razón de 67.712 acciones a 0,78 euros cada una.
El Sabadell está señalado como próxima pieza clave en el proceso de consolidación del sector financiero español una vez que CaixaBank y Bankia ya han fijado los términos de su unión. No obstante, sus problemas de rentabilidad en Reino Unido, donde acaba de anunciar el cierre de más sucursales de su filial TSB, están dificultando su participación en el proceso desde hace tiempo.