En un entorno de tipos de interés en mínimos históricos los ahorradores empiezan a ser conscientes de la necesidad de mover su dinero hacia alternativas rentables que, al menos, sean capaces de batir a la inflación.
Sin embargo, la falta de cultura financiera o la pura ‘pereza’ por buscar nuevos productos, suponen un obstáculo para dar ese salto necesario que nos aleje de activos tradicionales como los depósitos bancarios o la deuda pública a corto plazo, con rendimientos cercanos al 0% o, incluso, negativos.
Para impulsar ese cambio de chip entre los ahorradores, la gran banca lleva tiempo lanzando herramientas que faciliten la inversión de una forma sencilla y delegada en las entidades. Pero también están ‘forzando’ ese trasvase de depositantes a inversores a golpe de nuevas comisiones en los que contratar fondos de inversión, seguros o planes de pensiones, es la vía más rápida para evitar pagar por los servicios básicos.
El impulso fintech
En este escenario, el segmento fintech lleva años luz de ventaja a la banca tradicional, con figuras como los roboadvisor o con aplicaciones que facilitan al máximo el proceso de inversión. Y en este entorno, con el apoyo de Rabobank, nació Peaks en 2016, de la mano de Tom Arends, Rutger Beens y Sijbrand Tieleman.
Su objetivo es hacer accesible la inversión a todos los públicos, con la seguridad de contar con la supervisión del Banco Central Holandés (hace 3 años que comenzaron su operativa en Países Bajos y Alemania) y la autorización de la CNMV holandesa y española. En Países Bajos y Alemania ya cuentan con más de 500.000 descargas. En España, su potencial parece enorme, tras conseguir ya 5.000 descargas.
El lema de estos tres jóvenes emprendedores es claro: cualquier fortuna puede empezar a construirse desde un solo céntimo y todo el mundo debería tener la oportunidad de probarlo. Y es verdad. Probada por este medio, la aplicación Peaks es extremadamente intuitiva, y divertida, incluso para los más escépticos con aquello de ‘mover el dinero de debajo del colchón’.
De un solo vistazo, la aplicación permite ver el valor de las inversiones, ganancias y pérdidas, con sencillas opciones para depositar o retirar el dinero en cualquier momento. También cuenta con gráficos con la evolución de las inversiones y sus rendimientos, en euros y en porcentaje.
Descarga y... ¡a invertir!
Pero ¿cómo empezar a utilizarla? Una vez descargada y realizado el registro (en el que la entidad solicita datos como nombre, apellidos, DNI o la cuenta bancaria desde la que se realizarán las operaciones), el cliente puede elegir entre cuatro carteras de inversión (Suave, Sabrosa, Caliente y Picante).
Las carteras dependen del perfil de riesgo y están compuestas por fondos cotizados (ETFs), generalmente más baratos que los fondos de inversión por su estrategia de replicar índices o una cesta de valores.
La cartera ‘Suave’ invierte un 30% en renta variable y un 70% en bonos a través de ETFs de grandes firmas del sector como iShares o UBS. La ‘Sabrosa’ reparte su estrategia al 50-50 entre renta variable y renta fija, con un rendimiento bruto anual esperado del 4,3%.
El porcentaje en la cartera ‘Caliente’ se reparte en un 70% para bolsa y un 30% para bonos, mientras que la cartera ‘Caliente’, la de mayor riesgo, está compuesta en un 90% por ETFs de acciones y en un 10% de bonos, con un rendimiento anual esperado del 6,5%.
Además de la inversión pura a través de ETFs, Peaks ofrece otra serie de herramientas. Entre los usuarios, una de las que más éxito tiene es la que permite invertir el cambio de cualquier tipo de compra, algo que el cliente puede detener cada semana si no quiere hacerlo en un determinado momento.
Otra de las opciones que permite la aplicación es fijar una cantidad de inversión mensual de hasta 250 euros, que se reserva para invertir el último día laborable de cada mes. Del mismo modo, se puede separar una cantidad fija al día de hasta 10 euros que se invierte al final de la semana.
El coste de Peaks, disponible para Android e iOS también destaca entre sus competidores. Para atraer nuevos clientes, la app ofrece los tres primeros meses de uso de forma gratuita. Después, todo depende del volumen de la inversión. Si es inferior a 2.500 euros, la app cobrará 1 euro mensual de comisiones. Si es superior, el coste es de 0,5% anual sobre el valor medio de la inversión.
Por otro lado, no cobra comisión de depósito, retirada de dinero ni cambio de cartera, aunque el cliente sí paga la comisión propia de los fondos cotizados que componen las carteras.
“A pesar de estar atravesando tiempos económicos difíciles, España es para nosotros un país con gran potencial”, explica Tom Arends, cofundador de Peaks. “Somos conscientes de que a la mayoría de los españoles les cuesta ahorrar al no tener interiorizada esta disciplina. Igualmente, mucha gente se siente atraída por la inversión, pero no saben cómo empezar”, indican.
Y es cierto. Según un estudio de la fintech junto a la firma Cint 1, más del 88% de los españoles se muestran preocupados por su futuro financiero. Sin embargo, no son tantos los que se esfuerzan por maximizar su ahorro personal. Para paliar ese mal del ahorrador español, la app también tiene un espacio de información financiera explicada de forma sencilla, a través de diversos artículos.