Wall Street mantiene la calma tras el asalto al Capitolio llevado a cabo anoche por los seguidores de Donald Trump. Lejos de protagonizar una reacción de pánico, aunque solo fuese a corto plazo, por los disturbios y el grave golpe a la imagen democrática de EEUU, el mercado vuelve a descontar expectativas futuras que pasan por mayores estímulos tras la victoria demócrata al Senado en las elecciones celebradas ayer en Georgia. 

“Después de los disturbios en Washington D.C., el conteo de votos electorales continuó y era sólo cuestión de tiempo que el Congreso ratificase oficialmente a Joe Biden como presidente electo”, explican los analistas de Julius Baer.

Es decir, la principal plaza financiera del mundo tenía claro que el complejo panorama social en un país dividido no va a frenar la presidencia de los demócratas, que también liderarán las dos Cámaras, aunque sin el consenso suficiente para aprobar con facilidad medidas que no gustan demasiado a los inversores, como la subida del impuesto de Sociedades. 

Con este telón de fondo, Wall Street resiste a la tensión política con subidas del 0,74% que permiten al Dow Jones superar máximos de 31.000 puntos, mientras que el S&P 500 sube un 1% hasta los 3.800 puntos, mientras que el Nasdaq avanza con más fuerza. En concreto, suma un 2,35% que le llevan a nuevos máximos históricos por encima de los 13.000 puntos en los mejores momentos de la sesión. 

A la reacción alcista contribuyen también los buenos datos macro conocidos ya en el mercado. Entre ellos, las solicitudes semanales por subsidio de desempleo, con nuevas peticiones por 787.000.

Aunque la cifra sigue siendo muy abultada, se sitúa por debajo de las 800.000 esperadas y de las 790.000 registradas en la semana anterior. La media de cuatro semanas se sitúa así en 818.750 frente a las 837.500 anteriores, según recoge Bloomberg.

En el apartado empresarial, el mercado seguirá muy de cerca la evolución de los distintos sectores afectados por la política económica que llevará a cabo Joe Biden a partir del 20 de enero, cuando sea investido presidente de forma oficial.

Una victoria confirmada pese a los disturbios y que también ha elevado la rentabilidad del bono estadounidense a 10 años (treasury) hasta el 1,04%, nivel máximo desde marzo.

"La subida de tipos de interés tiene repercusión directa en el margen de interés de los bancos y, por lo tanto, en su rentabilidad", explican desde el departamento de análisis de Bankinter. De hecho, JP Morgan es uno de los valores que más contribuye a las subidas con avances del 4%. 

En el otro lado de la tabla amenazaban con situarse los grandes valores tecnológicos como Facebook o Google, que en la sesión del miércoles ya sufrieron la perspectiva de una regulación más estricta por parte del nuevo Gobierno en EEUU. Sin embargo, las tecnológicas son precisamente las que tiran del mercado con una revalorización, en los casos mencionados, del 3% y del 2%, respectivamente. 

Por cierto, que a lo largo de la sesión, las acciones de Tesla han tocado un nuevo máximo intradía con subidas de más del 6% alcanzando los 811 dólares, lo que implica que su capitalización ha superado a la de Facebook en esos momentos por primera vez en su historia bursátil. 

También destaca la fuerte subida de Walgreens Boots, de más del 4,5%, tras anunciar la venta de una mayoría de su unidad de farmacia al por mayor a AmerisourceBergen por unos 6.500 millones de dólares (unos 5.300 millones de euros).