Los avances pesaron más que los retrocesos al cierre de una semana marcada por las idas y venidas. El Ibex 35 consiguió su tercera semana consecutiva al alza, pero tuvo que conformarse con irse de fin de semana en los 8.286 puntos. Después de varios ataques frustrados a máximos del último año, ni siquiera pudo aguantar los 8.300 puntos que sí consiguió salvar en las otras cuatro sesiones de la semana.
La semana giró en torno al debate sobre la posibilidad de un imprevisto y drástico repunte de la inflación que alteraría todo el precario equilibrio que las economías han logrado a fuerza de estímulos monetarios y fiscales. El gran temor del mercado se centró en la posibilidad de un giro drástico de carteras por parte de inversores mayoristas o un traspié de cálculo por parte de los bancos centrales.
Aunque los supervisores, especialmente la Reserva Federal de EEUU (Fed), insistieron en la continuidad de los estímulos y restaron importancia a eventuales incrementos de precio en la cesta de la compra, el temor a un paso en falso en sus estrategias sembró dudas entre los inversores. Una situación que pobló de vaivenes todas y cada una de las últimas sesiones.
En cualquier caso, en los últimos días sí quedó patente la distinta velocidad de la recuperación económica. Mientras que en EEUU uno de los datos que hizo saltar las alarmas en torno a la posibilidad de un repunte de la inflación fue una tasa de paro de solo el 6,2%, en España se alcanzaban los 4 millones de desempleados con el peor mes de febrero de los últimos ocho años.
No obstante, los motores de la remontada de los índices fueron los valores de perfil más cíclico y más castigados en las horas más duras de la pandemia de la Covid-19. En el caso español, más especialmente las empresas del sector turístico, animadas por unos índices PMI más sólidos de lo que vaticinaron los economistas.
Turismo y petróleo
En la parte alta de la tabla de revalorizaciones del Ibex 35, IAG se llevó el mejor balance en el acumulado semanal con subidas del 16%. Un más moderado 4,4% se apuntó Amadeus, mientras que Meliá Hotels limitó su avance al 0,7%.
No obstante, por su peso en el índice, dos de sus blue chips marcaron la tendencia alcista de fondo. de una parte, Repsol sumó un 4% a su gráfica gracias al tirón alcista del precio del petróleo, con el barril Brent marcando máximos desde enero del año pasado. Por su parte, Telefónica consiguió sacar partido de algunos de sus últimos anuncios -como el desarrollo del primer coche eléctrico autónomo español- para sumar un 3,5% a su gráfica.
Renovables y farmacéuticas
En el otro extremo, las renovables -que con tanta fuerza cotizaron a lo largo de 2020- se colocaron esta última semana entre las más penalizadas. Siemens Gamesa perdió un 9% en la primera semana de marzo, mientras que Solaria se dejó un 8% mientras siguió siendo el patio de recreo de un creciente número de inversores bajistas.
El tándem farmacéutico conformado por PharmaMar (-8,8%) y Grifols (-6%) también se quedó en el vagón de cola. Allí compartieron plaza con el grueso de valores del sector financiero, aunque con pérdidas mucho más livianas como el 0,8% abajo del Santander, que a pesar de sus repuntes de última hora no logró recuperar la cota de los 3 euros por acción.
El paso atrás del viernes
La última sesión de la semana terminó con descensos del 0,8% después de haber oscilado un 1,8% entre máximos (8.387,1 puntos) y mínimos (8.239,7 puntos). Si bien el asalto a la cota de los 8.400 puntos se antojó del todo imposible durante la mayoría de la sesión, la pérdida de los 8.300 puntos fue cosa de un acelerón a la baja de última hora.
Solaria volvió a colocarse como farolillo rojo del índice, con caídas del 7%. IAG descargó parte de los avances conseguidos en sesiones previas con caídas del 5,8%. El podio se completó con Meliá Hotels, un 5,7% a la baja.
Las dos siguientes en el vagón de cola también procedieron de los mismos sectores que las anteriores. La turística Amadeus cedió un 3,4% al cierre del viernes, mientras que la renovable Siemens Gamesa perdió un 4,8%.
El verde más vistoso lo lucieron Banco Sabadell (+3,7%) y Almirall (+1,7%). El tercer puesto se lo quedó Telefónica, que un 1,5% al alza consiguió asomarse por encima de los 3,8 euros por acción y así recuperar su puesto como 'teleco' más capitalizada del índice español de referencia.
Más allá de estas tres líderes, otros tres pesos pesados de su cesta contribuyeron a amortiguar los descensos. Santander (+1,3%), BBVA (+0,6%) e Inditex (+0,5%) fueron el freno a un retroceso que, sin embargo, se llevó por delante la cota de los 8.300 puntos que se había aguantado durante toda la semana.