La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) avanza en los preparativos para la mudanza de su equipo de Barcelona a una nueva localización y la apertura de una nueva sede en Bilbao, dos proyectos que tiene en marcha desde hace años y para los que ha comenzado a dotarse de mobiliario.
El supervisor de los mercados ha sacado a concurso la compra del mobiliario para estas dos sedes con el objetivo de dotar a las nuevas oficinas "de la funcionalidad y operatividad necesarias", según consta en la licitación pública. Para ello, cuenta con un presupuesto conjunto de 116.668,2 euros, impuestos incluidos, para dos lotes diferentes.
Una parte, 60.996,1 euros, se destinará a la provisión de mesas, armarios y estanterías, lo que constituye el primer lote, mientras que el resto, 55.672,1 euros, se utilizará para costear el segundo paquete, que corresponde a la sillería.
Las empresas interesadas en proveer a la CNMV de estos materiales podrán presentar sus ofertas hasta el próximo jueves, 15 de abril.
El plan de la CNMV es continuar con los preparativos de la sede de Bilbao durante 2021 y este mismo trimestre realizar el traslado de su equipo a la nueva localización de Barcelona.
Acuerdo con la CNMC
En la Ciudad Condal, el supervisor está a punto de cambiar de sede. A lo largo del segundo trimestre de este año prevé abandonar su ubicación actual, en el Paseo de Gracia, y mudarse al edificio que actualmente ocupa la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en Barcelona, con la que compartirá espacio.
Ambos supervisores llegaron a un acuerdo en el otoño del pasado año para compartir espacio en esta sede y la CNMV se ubicará en la cuarta planta del inmueble, ubicado en la calle Bolivia, número 56.
Paralelamente, el supervisor se encuentra inmerso en los preparativos para la apertura de una nueva sede en Bilbao con el objetivo de potenciar su carácter empresarial, un objetivo que nació durante la presidencia de Sebastián Albella, que dejó el cargo el pasado mes de diciembre.
Finalmente, el destino elegido para la sede será el emblemático edificio de la antigua Aduana, propiedad del Estado, en cuya restauración se invirtieron unos 13 millones de euros, según publicó El Correo.
Por el momento, las obras de acondicionamiento de estas dos nuevas sedes siguen desarrollándose en estos momentos, pero el supervisor ha decidido iniciar ya las nuevas contrataciones para tener margen.