Los máximos del mes de febrero del año 2020, justo antes de la llegada de la pandemia teníamos al precio de las acciones del Banco Santander en los 3,76 euros y los de las acciones del BBVA en los 5,31 euros.

Lo que ha ocurrido a lo largo de todos estos meses bien es sabido por parte de todos los lectores de Invertia: bajadas muy pronunciadas en un principio que dieron paso a un ligero goteo a la baja para continuar, de cara a finales del mes de octubre del año pasado a un suelo definitivo e inicio de la reacción alcista por todas las bajadas sufridas en la primera ola de la pandemia.

Primero fue de manera lenta, pero luego, sobre todo en el mes de noviembre, fue de manera brutal, y como podemos ver en el siguiente gráfico comparativo de ambos valores, la recuperación ha venido sistemáticamente liderada por las acciones del BBVA. De hecho, ya tenemos al BBVA con la recuperación de la totalidad de la caída desde los máximos del mes de febrero del año pasado sobrepasados en más de un 3% mientras que el banco cántabro todavía se encuentra a más de un 8% de llegar a dicho nivel.

Evolución comparativa desde el comienzo de la pandemia Eduardo Bolinches

Por lo tanto, es obvio pensar que la tendencia alcista continuará vigente, pero lejos de creernos esta afirmación a pie juntillas lo que debemos tener en cuenta es que lo que impera en el mercado, más allá de los correspondientes dientes de sierra a modo de correcciones y posteriores rebotes, es que la pauta de mínimos crecientes que presentan ambos valores continúe intacta. Esto es lo que realmente debemos tener muy mente. 

Estamos hablando por lo tanto que bajo ningún concepto podemos estar tranquilos viendo que las acciones del Banco Santander se colocan por debajo de los 2,79 euros ni las del BBVA por debajo de los 4,28.

A fin de cuentas, hay un viejo dicho que lo deja muy claro: "La tendencia alcista estará en vigor mientras que se demuestre lo contrario". Pues bien, hoy por hoy esos son los niveles que nos quitarían la razón. Por lo tanto y en conclusión, es cuestión de tiempo que el Santander, siguiendo la estela del BBVA, alcance los niveles de febrero del año pasado en los 3,76 euros.