El presidente de PharmaMar, José María Fernández de Sousa, ha dado cuenta de un nuevo incremento de peso en el capital de la compañía. A consecuencia de sus últimas compras de acciones de la farmacéutica, su participación alcanza ya a un 11,126% del accionariado.
Fernández de Sousa ha notificado este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) los detalles de este incremento de inversión. El formulario señala que se trata de una "notificación voluntaria" con el objetivo de actualizar su participación a razón de sus últimas compras, debidamente comunicadas en los últimos días al supervisor.
En este sentido, el presidente no rebasa ni perfora ninguno de los umbrales que hacen necesario que un inversor actualice su posición. No obstante, al ser miembro del consejo de administración, Fernández de Sousa sí que tiene la obligación de notificar a la CNMV cualquier movimiento de compraventa de acciones de PharmaMar.
Conforme a la actual cotización de PharmaMar, su participación asciende a un valor de mercado de 112,32 millones de euros. El presidente explica al supervisor que todo el paquete se construye a través de la posesión de acciones de la farmacéutica. También de forma indirecta por la cartera que corresponde a su esposa.
Tanto es así que, este mismo miércoles, la también consejera dominical de PharmaMar, Montserrat Andrade, ha notificado que su peso en la compañía se eleva hasta el 5,116% del capital en la actualidad. En este caso, su participación equivale a una inversión de 51,65 millones de euros a precios de mercado.
Lucha contra la Covid
La notificación del matrimonio se produce en un momento de especial significación para la farmacéutica, pues está en pleno estudio de los efectos que su fármaco Aplidín puede tener en el tratamiento de pacientes de Covid-19 con infección moderada. Unos análisis que, hasta la fecha, han revelado eficacia incluso contra la variante ómicron.
Así se publicó el pasado 11 de enero en la prestigiosa revista Life Science Alliance. Las conclusiones de los estudios dirigidos por el doctor Adolfo García-Sastre, catedrático en el Departamento de Microbiología de la Escuela de Medicina Icahn del Monte Sinaí, en Nueva York (EEUU) señalaron que "plitidepsina ha demostrado tener una potente actividad antiviral en todas las variantes a concentraciones bajísimas (nanomolar) con un índice terapéutico in vitro positivo".