Las advertencias de la industria de inversión se han cumplido. La conocida como 'tasa Tobin' apenas reportó a las arcas públicas ingresos por 296 millones de euros en su primer año de vigencia, según ha anticipado este jueves el Ministerio de Hacienda. Es decir, un 34,8% de lo que esperaba el departamento dirigido por María Jesús Montero.
A falta de que estas cifras se confirmen definitivamente, todo indica que sin lugar a dudas el Gobierno se ha quedado muy lejos de su objetivo recaudatorio con la 'tasa Tobin'. La meta era que este nuevo y discutido gravamen reportase ingresos a las arcas del Estado por unos 850 millones de euros al año.
Desde la Agencia Tributaria ya se había advertido de que habría que modular este objetivo por el retraso que sufrió para su entrada en vigor la norma que establecía el tributo. Sin embargo, ni con esas se alcanza un cuadro favorable a las estimaciones de Moncloa.
Retrasos y advertencias
En este sentido, la 'tasa Tobin' comenzó su aplicación solo con una quincena de retraso tras el inicio del año. Esto habría supuesto la pérdida de unos 50 millones de euros conforme a una media ponderada por volúmenes de negociación en la bolsa española, según adelantó este portal.
La cifra finalmente anunciada por Hacienda hace que hasta las previsiones más cautas que lanzó el sector meses atrás hayan terminado pecando de optimistas. Un escenario que el Gobierno negó una y otra vez cuando sus números se ponían en tela de juicio tomando como referencia lo conseguido en otras economías europeas que habían establecido tributos similares con anterioridad.
Algo que hizo incluso Sebastián Albella, el entonces presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Y no fue la única personalidad del sector, pues también el expresidente de BME, Antonio Zoido, se prodigó en advertencias en este sentido.
Una de las últimas previsiones en torno a la recaudación del Impuesto a las Transacciones Financieras, que es su nombre formal, fue la que los técnicos de CECA lanzaron el pasado noviembre. Entonces, desde la institución se estableció un rango de entre 300 y 400 millones de euros. Al final, hasta la peor de las hipótesis se ha quedado larga.
Aplicación restrictiva
Los datos publicados en un informe de la Agencia Tributaria en septiembre ya apuntaban hacia este escenario. Entonces, se informó de que la primera liquidación de la 'tasa Tobin' se tradujo en ingresos por 150 millones de euros. Es decir, apenas un 17,6% del objetivo que se había marcado el Gobierno en su plan fiscal. Menos de una quinta parte.
Desde la industria española de inversión se ha criticado con dureza que este impuesto finalmente solo se esté aplicando a las compras netas de acciones de compañías cotizadas domésticas con más de 1.000 millones de capitalización al cierre del año anterior. Una circunstancia que penaliza a estos títulos frente a otros no sujetos a la discutida tasa del 0,2% que, por el momento, no se aplica a derivados financieros ni a operaciones intradía, más vinculadas con posiciones especulativas.
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