Comienza el fin de la aventura bursátil de Siemens Gamesa con la oficialidad de la Opa presentada este fin de semana ante la CNMV para adquirir por parte de Siemens Energy el 32,93% del capital que no posee. 

El precio ofrecido está muy estudiado. Los directivos de Siemens Energy han demostrado ser pacientes con el valor y dejarlo caer con el paso de los meses hasta una zona de precios muy potente.

Concretamente, entre finales del año 2017 hasta principios del año 2020, el valor estuvo cotizando entre los 9 euros por la parte inferior y los 16 euros por la parte superior tal y como podemos ver en el siguiente gráfico.

La zona central de dicho rango son los 12,5 euros que es precisamente lo que han estado esperando pacientemente los directivos de Siemens Energy para lanzar la Opa, que posteriormente y según el éxito que tenga acabará siendo de exclusión de Siemens Gamesa. 

¿Por qué los 12,50 euros? 

El precio de 12,50 euros tiene una explicación. La normativa bursátil te obliga a lanzar una Opa a un precio mínimo de la media del último trimestre. Y como es obvio, con un valor claramente bajista cuyo gráfico roza la perfección para poder explicar lo que es un canal bajista y que muy pronto veremos en multitud de manuales de análisis técnico, la consigna estaba clara: prisa ninguna. 

Nadie va a hacerse con el poder de la empresa, ya que Siemens Energy posee el 67,07% de la sociedad, así que lo único que tenían que hacer era esperar a que los inversores entrasen precisamente esperando dicha Opa y posteriormente se fuese minando la esperanza de recuperar el dinero para salir entonces como los salvadores de última oportunidad.

Y ahí es donde nos encontramos. Si se fija en el gráfico diario, el mayor número de inversores que intercambiaron acciones se produjo entre los 15,78 euros y los 16,86. Es la gran barra horizontal que nace desde la parte izquierda del gráfico hasta sobrepasar más allá de la mitad del gráfico. 

Este nivel de precios está muy distante de la siguiente gran zona de contratación de acciones que se produjo entre los 20,05 y los 22,20 euros. Este gran grupo de inversores sí que tienen claro qué es lo que deben hacer: esperar.

Esperar por si se produce un milagro y trastiende que los inversores no están acudiendo a la Opa por lo que en un futuro podría haber otra a precios más atractivos. 

Esta opción parece muy difícil de que se produzca además de arriesgada porque sabemos con toda seguridad que tras esta Opa habrá otra de exclusión y de nuevo el precio debe ser cuanto menos de la media de los últimos 3 meses.  

Sabiendo que no tienen prisa y siendo dueños del 85% de la sociedad por poner un ejemplo podrían volver a dejar caer a la acción a 12,5 o incluso a 9 euros y lanzar la Opa de exclusión entonces. 

Otra situación muy diferente es la que tienen los inversores que han entrado más recientemente, que a la vista del gráfico anterior sabemos que son muchos. En este caso, tal y como suelo decir siempre, el negocio se hará vendiendo en la primera hora de contratación de mañana y dispondremos del dinero libre para otros menesteres.