No parece el hombre más poderoso del universo de las criptodivisas, pero posiblemente lo sea. Se llama Sam Bankman-Fried, tiene 30 años y es el fundador y CEO de la plataforma de intercambio de activos digitales FTX. Su éxito le ha llevado a amasar una auténtica fortuna.
Bankman-Fried es el típico millenniall. De aspecto desaliñado, fan de Harry Potter y jugador del videojuego 'League of Legends' gracias a su poder y conocimiento de esta industria es considerado por muchos como el “el Warren Buffett” -histórico inversor de Wall Street- de las criptomonedas.
Tal y como explica Forbes, SBF, como también se le conoce, es hijo de dos profesores de Derecho de Stanford, EEUU. Tras graduarse en una pequeña escuela secundaria, se matriculó en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés), donde estudió Física.
Warren Buffett
Fue entonces cuando se dedicó a leer sobre la filosofía utilitaria y el altruismo efectivo. Corriente defendida por el filósofo Peter Singer, y con mucho éxito entre algunos millonarios de Silicon Valley, se fundamenta en usar la razón para hacer el mayor bien posible, algo que ha influido notablemente en todas sus decisiones empresariales.
Su primer trabajo lo obtuvo en 2014 en la firma de inversión Jane Street Capital. Donó prácticamente todo el salario -de seis cifras- obtenido. Tres años después, en 2017, decidió fundar su primera empresa, Alameda Research.
Coincidió en el tiempo con el fuerte rally que registró el bitcoin, cuando en solo seis meses la criptodivisa más famosa del mundo pasó de valer 2.500 dólares a casi 20.000. Fue entonces cuando vio la oportunidad. Comenzó a comprar bitcoin en EEUU para venderlos en Japón por un 30% más al aprovechar la diferencia de precios, la conocida como ‘prima kimchi’.
"Me involucré en las criptomonedas sin tener idea de qué eran", confesó a Forbes. El siguiente paso fue fundar su propia plataforma de intercambio. En 2019 vio la luz FTX, calificado por algunos como el mejor exchange jamás construido.
[El ‘criptoinvierno’ comienza a reventar la burbuja de las plataformas de criptodivisas]
El éxito de FTX se traslada a su valoración. En 2021, los inversores dieron a la plataforma un valor de 18.000 millones de dólares. Gracias a ello, Bankman-Fried amasa una fortuna de 20.600 millones de dólares, según los últimos datos de Forbes.
Posee aproximada la mitad de FTX y una parte importante de sus tokens, bautizados como FTT. Los éxitos de este niño prodigio de la inversión le han llevado a ser el treintañero más rico del mundo y el segundo en lograr tal suma a una edad tan temprana. Solo Mark Zuckerberg, el fundador de Facebook y CEO de Meta, ha ganado más dinero siendo tan joven.
Caballero blanco
Es, además, el caballero blanco de las plataformas de intercambio de criptodivisas. En pleno 'criptoinvierno' el término acuñado para nombrar las fuertes caídas que desde el pasado noviembre -cuando alcanzaron máximos históricos- registran estos activos, se ha lanzado a rescatar algunas empresas.
Ha concedido amplias líneas de crédito para garantizar la viabilidad de las plataformas Voyager Digital o BlockFi y se especuló con la posibilidad de que se hiciera con el bróker Robinhood, del que posee un 7,6%.
Intervención de Sam Bankman-Fried en la CNBC.
Su fama, sumado al creciente interés del público por las criptodivisas, ha hecho que esté presente en varias televisiones, como la CNBC, para hablar del precio del bitcoin, la regulación o el futuro de los activos digitales.
Sobre el desplome de las criptodivisas, en una reciente entrevista con Fortune, señalaba que “no lo habría adivinado tan mal”, aunque sí esperaba que el Nasdaq cayera prácticamente un 40% desde su último máximo. En su opinión, la mayor parte del hundimiento al contexto económico.