Los principales índices de Wall Street iniciaban la sesión del miércoles en positivo. El parqué neoyorquino intentaba recuperarse de las caídas de la sesión anterior -fue la peor jornada del Dow Jones desde marzo- mientras que la atención de los inversores recaía sobre el posible cierre de Gobierno de Estados Unidos.
El Dow Jones subía un 0,1%, hasta los 33.618,02 puntos; el S&P 500, un 0,25%, hasta los 4.283,72 puntos, y el Nasdaq, un 0,44%, hasta los 13.119,06 enteros.
Amgen (+1,27%), Chevron (+0,92%) e Intel (+0,83%) encabezaban las subidas del Dow Jones, mientras que Goldman Sachs (-0,7%), Travelers (-0,65%) y American Express (-0,62%) lideraban los descensos.
La rentabilidad de la deuda estadounidense se relajaba. El interés ofrecido por el bono a 2 años se moderaba al 5,07%; mientras que el del bono a 10 años se reducía al 4,52%.
La menor rentabilidad de la deuda beneficiaba a los grandes valores tecnológicos. Apple, Microsoft, Tesla, Nvidia y Alphabet, sumaba entre un 0,4% y un 0,8%, respectivamente.
Wall Street cerró este martes con pérdidas. El Dow Jones bajó un 1,14% registrando su peor sesión desde marzo. El S&P 500 cedió un 1,47% y el Nasdaq perdió un notable 1,57%.
Según los analistas, la bolsa respondió con pesimismo a unos datos flojos publicados sobre las ventas de viviendas y la confianza de los consumidores en Estados Unidos, lo que reforzó los temores a una recesión.
El jueves se conocerá la revisión del Producto Interior Bruto (PIB) del segundo trimestre, además del Índice de Precios de Gastos de Consumo Personal (PCE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. Esta última es la medida de inflación favorita de la Reserva Federal (Fed).
El mercado da unas posibilidades del 80% a que el banco central estadounidense mantenga los tipos de interés. Las probabilidades de que tampoco los modifique en diciembre son del 64%. Ya en marzo se valora un recorte de tipos de 25 puntos básicos, que superaría el 33% en junio y julio.
Cierre de Gobierno
Más allá de en las perspectivas sobre los tipos de interés, la atención de los inversores se centraba en el posible cierre de Gobierno de Estados Unidos. Podría producirse a partir de la semana que viene, cuando está previsto que se acaben los fondos disponibles.
Los líderes demócratas y republicanos del Senado propusieron este martes un plan para financiar al Gobierno hasta mediados de noviembre, lo que evitaría un cierre de la Administración.
La propuesta, que ya ha pasado su primer trámite parlamentario en la Cámara Alta, de mayoría progresista, necesitará también el apoyo de la Cámara Baja, controlada por los conservadores, y donde un grupo de congresistas republicanos díscolos se resiste a aceptar una solución a corto plazo para financiar a las agencias federales.