El selectivo español ha comenzado la jornada de este lunes, con un interesante hueco alcista, buscando distanciarse de los mínimos registrados la semana pasada, situados en las inmediaciones de los 9.800 puntos. Si echamos una mirada a la tabla, veremos que las acciones de ArcelorMittal se sitúan en la parte alta, construyendo un interesante rebote.

Este movimiento se produce a pesar de la noticia de que el Gobierno italiano, liderado por Georgia Meloni, llevará a cabo la nacionalización temporal de la principal planta siderúrgica del país, Acciaierie d'Italia. Actualmente, ArcelorMittal posee el 61% de participación en la planta, mientras que el 38% restante está en manos de la entidad pública Invitalia. Esta decisión se tomó después de que las negociaciones entre el Estado y la multinacional no llegaran a un acuerdo.

En otro orden de ideas, como parte de sus esfuerzos por reducir costos operativos, la compañía siderúrgica continuará con su proyecto de descarbonización de los altos hornos en el norte de Francia, destinando una inversión de 1.800 millones de euros a esta iniciativa.

[Consulte aquí las claves operativas del Ibex 35, según el analista Eduardo Bolinches]

Para analizar el valor desde una perspectiva técnica, es esencial observar el significativo rebote que tuvo lugar desde la proximidad de los 20 euros en noviembre de 2023 hasta los máximos alcanzados cerca de los 26,40 euros en diciembre, representando un incremento superior al 32% durante ese periodo.

Tras esta importante revalorización de sus acciones, ha tenido lugar una fase de ajuste considerable y prolongada, resultando en una caída de más del 10% de su capitalización bursátil. Un descenso constante que ha llevado al valor a buscar el nivel clave de soporte alrededor de los 23,70 euros. Un nivel en el que encontramos además la presencia de su media móvil de 200 períodos, actuando como suelo de mercado a corto plazo desde el cual se ha generado una reacción al alza muy interesante.

En consecuencia, considerando las circunstancias actuales, se puede concluir que la fase de ajuste de corto plazo por la que atravesaban sus acciones ha llegado a su fin. Los últimos movimientos de sus acciones sugieren la posibilidad de que el rebote experimentado pueda mantener cierta continuidad.

Desde una perspectiva operativa, identificamos una zona de resistencia clave situada en los 24,90 euros por acción. Si el valor es capaz de situarse por encima de este nivel en precios de dos cierres diarios consecutivos o uno semanal, nos abrirá una ventana de incorporación en el lado alcista o comprador, con el riesgo bastante limitado. 

[La cartera de acciones de Eduardo Bolinches para la sesión de hoy]

Si finalmente se da este escenario, que además es el más probable, el objetivo alcista se ubicaría en la siguiente resistencia horizontal, situada en los 26,10 euros por acción.

Para salvaguardar nuestra posición, estableceremos una orden de protección justo por debajo de los mínimos de la semana anterior, es decir, en caso de que el valor caiga por debajo de los 23,70 euros.