Técnicamente, la situación del Ibex 35 responde en el largo plazo a un movimiento bajista que puede verse claramente sombreado en el gráfico. Esta caída todavía no ha finalizado, o al menos no hay señal de que lo haya hecho, por lo que se mantienen dos posibilidades técnicas:
1. Que la caída continúe y retroceda hasta el soporte del origen de la última subida, en los 7.500 puntos; o
2. Que rompa el canal bajista y rebote hasta un entorno aproximado de 10.500 puntos.
Pero es necesario realizar un zoom sobre el gráfico y observar plazos inferiores.
En la banda roja se marcó la gran resistencia que frenó varias veces al Ibex y que recientemente rompía al alza. Pero la cotización durante cinco días respondió a velas con fuertes sombras superiores (es decir, con aperturas y cierres muy alejados de los máximos) que señalaban cierta dificultad para avanzar.
Y, dado que, si no puede ir en una dirección, inevitablemente va en la otra, el Ibex finalmente rompió a la baja y generó un pequeño hueco. Este hueco es el punto clave de corto plazo. Por encima de 9.220 volvería a dar señales de fortaleza. Pero a la baja no hay caído con fuerza, al revés, mantiene los 9.100 puntos, actuando como soporte relevante.
Con todo ello, se mantiene en un estrecho rango de cotización. Si finalmente pierde 9.100 buscará, presumiblemente, el origen del último subtramo en 8.830 puntos.