Merlin Properties invertirá 700 millones de euros para transformar sus actuales edificios y desarrollo de nuevas naves logísticas, su principal objetivo es mantener su balance robusto y un apalancamiento saneado. Para la inversión la inmobiliaria utilizará 450 millones de activos no estratégicos y el resto procederá de la caja de la compañía. 

Los títulos de Merlin mostraron un buen comportamiento en el periodo que transcurre de junio de 2016 a mayo de 2018, su cotización pasó a revalorizarse de los 8,2 euros a los máximos históricos de los 13 euros por acción. A partir de ahí, realizó un movimiento correctivo hasta los 10,3 euros y ahora intenta recuperar la caída.

A nivel técnico, a finales de 2018 el valor ha iniciado una estructura alcista con la consecución de máximos y mínimos crecientes. Desde el último máximo en los 12,4 euros la compañía parece frenar en el primer nivel 23,6 del retroceso de Fibonacci que además con un nuevo apoyo a la tendencia alcista en la cota de los 11,9 euros. En este sentido, aprovecharíamos para buscar una entrada pensado que la compañía de nuevo puede superar los máximos previos.

Por el contrario, si las acciones de Merlin no logran mantener el soporte de los 11,9 euros la cotización podría sufrir caídas de mayor calado y visitar el siguiente nivel 38,2 del retroceso de Fibonacci en la zona de los 11,6 euros. La media móvil de 200 sesiones (línea gris) ha sido perforada por el precio y podría ser una señal negativa para el valor.  Para intentar minimizar el riesgo de la operativa intentaremos buscar limitar las pérdidas colocando un 'stop loss' en el anterior nivel mencionado de los 11, euros por acción.

*Guillermo Torrego, es analista de XTB

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